El ex superintendente de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF) Raphael Bergoeing, hoy investigador del Centro de Estudios Públicos (CEP) hizo un llamado a enfocar el debate local en enfrentar la concentración económica y el financiamiento a los partidos políticos, más que en reformas tributarias.
A su juicio, los cambios en políticas tributarias no son determinantes para atacar la desigualdad, pues sólo un 25% de la reducción de la desigualdad en el índice de Gini viene de esas medidas.
En un análisis publicado en el CEP titulado “Reflexiones sobre el Modelo: Crecimiento, desigualdad y prosperidad en la economía global”, Bergoeing dijo que se debe cuidar el modelo económico y enfocarse en tomar medidas que lo perfeccionen.
“No hay que remplazar el modelo económico; por el contrario, debemos fortalecerlo, arreglando sus fallas. De hecho, es gracias a este avance que este modelo ha generado el que en Chile hayamos podido plantearnos metas económicas más desafiantes recientemente”, afirmó el ex titular de SBIF.
Además, agregó que “sin el ingreso alcanzado durante las tres últimas décadas, probablemente hoy no estaríamos debatiendo sobre desigualdad, o al menos no lo estaríamos discutiendo con posibilidades realistas de combatirla sustentablemente”.
El también profesor de Ingeniería civil Industrial de la Universidad de Chile señala que “hay que cuidar (el modelo) que tenemos, pero también entender que para mantener un crecimiento elevado, se necesitan compromisos públicos mayores y reformas competitivas más profundas que las ya asumidas”.
En ese sentido, Bergoeing apunta a “conciliar un mayor dinamismo económico con mayor equidad”, poniendo como ejemplo de ello las políticas macroeconómicas aplicadas en las décadas previas, con reformas sociales que le den sustentabilidad al modelo y una institucionalidad fortalecida que proteja el buen funcionamiento de los mercados.
A su juicio, sin reformas sociales que den sustentabilidad al modelo y sin una institucionalidad fortalecida que proteja el buen funcionamiento de los mercados, promoviendo nuevas ganancias de eficiencia “no cerraremos la brecha que nos separa del desarrollo económico”
En esta línea propuso dos líneas de acción. “Por una parte, se debe fortalecer la regulación de conglomerados económicos, con énfasis en los que participan en el sector financiero. Esto reduce el riesgo de crisis sistémicas y protege la competencia y la confianza en el modelo económico. Además, es necesario mejorar el sistema de financiamiento de los partidos políticos, de modo de socavar la relación entre los poderes económico y político, profundizar los lazos entre la población y los partidos, y fortalecer su rendición de cuentas”, explicó en su trabajo.
Sobre las virtudes que pudiera tener una reforma tributaria –sin apuntar directamente al proyecto de ley que discute hoy en el Congreso- Bergoeing hace algunas advertencias. Señala que el hecho que el coeficiente de Gini antes de impuestos y transferencias monetarias en Chile sea similar al de varios países mucho más avanzados “sugiere que, en los datos, otros factores tradicionalmente considerados relevantes para la desigualdad, como la calidad de la educación, no han cambiado el resultado primario de la interacción económica”.
“De lo contrario: ¿Por qué países con indicadores de calidad educacional tan distintos tienen coeficientes de Gini antes de la intervención del Estado tan similares?”, sostiene.
Y aunque reconoce que la desigualdad reduce la capacidad de crecimiento y su sustentabilidad, eso “no significa que las políticas redistributivas sean convenientes, puesto que éstas pueden, por sí mismas, reducir el crecimiento”.
