Patricio Phillips protagonizó ayer la jornada más sabrosa de la Comisión Investigadora sobre el caso Cascadas de la Cámara de Diputados.
El director de las sociedades controladas por Julio Ponce Lerou que forman parte de la cadena de propiedad de SQM, reveló ayer nuevos correos intercambiados con el ex subsecretario de Hacienda del gobierno de Sebastián Piñera, Julio Dittborn, en los que el UDI habría intervenido no sólo ante el titular de la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), Fernando Coloma, para entregar la visión de Julio Ponce sobre el caso, sino que también llegó a conversar con el propio ministro de Hacienda de la época, Felipe Larraín.
Hasta ahora se conocían los mails (https://www.elmostrador.cl/negocios/2014/05/19/los-mails-que-hacen-tambalear-la-tesis-de-pinera-de-que-el-tema-cascadas-nunca-fue-tratado-en-la-moneda/) donde se confirmaba la intervención de Dittborn a pedido de Phillips y Ponce ante el jefe de la SVS de la época en mayo de 2013, pocos meses antes que la Superintendencia formulara cargos contra el empresario. Esta información fue presentada ante el fiscal Jose Morales este año.
Pero en la sesión de ayer, Phillips agregó nuevos antecedentes. El principal fue una conversación que tuvo con Dittborn después de su reunión con Coloma, en que el ex subsecretario de Hacienda revela que conversó con Larraín.
Aunque la tesis del entorno de Ponce es que estos correos confirman que La Moneda sabía del caso y que incluso podría haber intervenido, los nuevos antecedentes sólo demuestran la profundidad de las intervenciones de Dittborn a pedido de Phillips, cercano de Ponce.
Larraín, encogido de hombros
Phillips reveló que le envía un correo a Dittborn donde le señala que “tal vez para evitar malas interpretaciones debieras contarle algo parecido a Felipe Larraín, sobre todo por las consecuencias en el ámbito político”.
Según Phillips, las consecuencias políticas serían la conversación que Piñera habría tenido con el abogado cercano a Ponce, Darío Calderón, en una comida en honor el fallecido socio de Lan, Juan Cueto. En ella, según declaró Calderón ante la Fiscalía, el ex Presidente le habría dicho que le dejara a él el tema de Cascadas en la SVS.
La tesis que desliza Phillips es que dado que Piñera se mantenía como accionista minoritario cuando asumió la Presidencia, aunque aparentemente con las inversiones dentro del fideicomiso ciego, tendría participación en la disputa de Moneda Asset Management con Ponce.
Esta pelea incluyó una negociación principalmente en 2012, en la que participaron Calderón por Ponce, distintos representantes de Moneda, como su presidente Pablo Echeverría y el abogado Pedro Pablo Gutiérrez, además de José Cox.
La presencia de Cox en estas conversaciones aparece como clave, porque en ese momento era director de Bancard, la sociedad de inversiones de Piñera. Aunque Cox ya ha dicho que no lo hizo en representación de Bancard sino como mediador entre Moneda y Ponce.
En su relato de ayer, el director de Cascadas indica que el 10 de junio Dittborn le responde que esperará el momento y lo hará. Luego, el viernes 12 de julio, Dittborn vuelve a a la carga y le escribe a Phillips, revelando una conversación con Larraín, hasta ahora desconocida, donde reconoce que conversó con el referido Larraín y le pide destruir el correo.
“Pato, recibí tu mensaje hoy en la mañana y hable con FL (Felipe Larraín) el tema que te preocupa. Estaba al tanto en términos generales pero no se quiere involucrar mucho. Me dijo que las multas eran facultad de FC (Fernando Coloma) y que él no se metería. No quiso meterse en detalles conmigo, como los posibles manejos de precios. Advertido de que esto podría derivar en un problema político mayor, se encogió de hombros como diciendo ‘así será’. Siento que cumplí con advertir y no hubo mayor reacción. Te pido que no reenvíes este mail a nadie y que lo destruyas después de leerlo”.
Este inédito correo no fue parte de la declaración publicada de Julio Ponce ante el fiscal José Morales, donde revela la conversación de Dittborn y Coloma.
Aún resta que Darío Calderón asista a la comisión, pues habría declarado ante el fiscal Morales que José Cox pidió que Ponce pagara US$ 70 millones a Moneda y a minoritarios por los perjuicios que, según Moneda, habrían provocado las operaciones de Ponce, Guzmán y Vial, las que luego dieron pie a la investigación y sanciones de la SVS.
Morales también estuvo ayer en la Comisión Investigadora, donde ratificó las declaraciones de Calderón, pero dijo que no fue suficiente para establecer la intervención de Piñera en el caso. Por ello, la Fiscalía pidió y logró el sobreseimiento de la demanda de prevaricación presentada por Julio Ponce contra la SVS.
