“América Latina está en una muy buena posición para crecer y no sólo se debe a los commodities”, señaló Jeffrey Sachs, el economista de la Universidad de Columbia. De esta manera, le puso coto a cierto pesimismo que se había instalado a lo largo de la conferencia del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Conocido y reconocido por sus planteamientos sobre pobreza y desarrollo, este asesor de gobiernos y organismos multilaterales dio de qué hablar el sábado en la tarde. No sólo porque apoyó explícitamente el acceso gratuito y universal a la educación que impulsa la presidenta Michelle Bachelet y porque favoreció una salida al mar para Bolivia, sino porque su discurso paseó a los oyentes por la historia de América Latina.
“Después de 1492, esta es una región conquistada por los europeos, quienes trajeron esclavos y crearon una mezcla étnica compleja(…) Miren el conflicto racial en Ferguson y Nueva York con enormes manifestaciones que vi en mi propia calle en Manhattan. Nunca deben descuidarse –les advirtió-, este tema de la diversidad debe estar en el centro de la preocupación”.
Agregó que “ésta es una de las regiones más desigual y por cientos de años ha sido así políticamente hablando, porque una minoría de la población gobernaba sobre la mayoría, cuyo trasfondo es la violencia. Los EE.UU. es una sociedad muy violenta, mucho más que Europa y otras partes, y esto también se replica en América Central y en América del Sur. Eso se debe a la estructura de la conquista”.
Luego se refirió a los efectos de un continente, cuya densidad poblacional es baja en relación a Asia o Europa. “Ha sido una sociedad de baja densidad de la población. Esta ha sido una región de commodities desde el comienzo: mucha tierra, muchos metales y pocas personas. Los europeos no sólo oprimieron, sino que los patógenos que trajeron eliminaron grandes poblaciones de América Latina (…) América tiene baja densidad de población y una alta proporción de commodities per cápita. Esta discusión del fin del súper ciclo es propio de la región y esta discusión no la tienen los asiáticos”.
La geopolítica en retirada
La geopolítica fue uno de los elementos centrales de la presentación de Jeffrey Sachs.
“EE.UU, a través de la doctrina Monroe decidió muy pronto, incluso antes de tener un ejército y una armada que sería la policía del resto del hemisferio. Eso impidió que América fuera recolonizada en la segunda mitad del siglo XIX. Pero más raro que la
doctrina Monroe, fue la doctrina Roosevelt en 1904 que reafirmó la idea del policía. EEUUU se transformó en una superpotencia industrial y ocupó territorios como Nicaragua. El ejército americano nunca ha sido un promotor de desarrollo, al contrario ayudó a perpetuar el subdesarrollo político”.
“Hemos tenido un política mesiánica de derecha desde 1945” que miraba con sospecha cualquier gobierno de centro izquierda en la región(…) “Finalmente, las políticas socialdemócratas han demostrado que son las adecuadas para la región y desde 1991 esto ha desparecido de manera importante”, explicó.
Yéndose a los problemas propios de la región, argumentó que “una de las mejores partes del súper ciclo es que se ha logrado una verdadera independencia de Estados Unidos, pero éste siempre está cerca y es un imán para las migraciones que es un tema muy difícil en un mundo dividido”.
“EEUU es el país número 1 en consumo de estupefacientes lo que ha provocado una militarización de América Latina. Sus sociedades sufren la carga onerosa de esta batalla con índices de violencia grandes en América Central y Sudamericana.
Esa es la historia profunda que debemos comprender y los elementos singulares de América Latina, añadió.
Sobre la dependencia a otro gigante como es China, dijo que el auge de este país -a pesar de sus problemas macroeconómicos- no va a desaparecer. China será la economía más grande del mundo. La República China también está influyendo geopolíticamente. “No hay una región en el mundo que no esté en la mira de China para las relaciones diplomáticas”, señaló.
“Si piensan que los súper ciclos ya es una fase terminada, desenchufen CNBC y no vean las noticias. Puede que el petróleo esté en 70 dólares el barril, pero volverá a estar a US$ 100”, dijo de manera tranquilizadora.
La otra mirada
“El regreso de la democracia ha propugnado la igualdad en América Latina y le dio la voz a los que no tenían voz (…) No estamos con niveles buenos de educación, pero sí se aumentó el acceso a la educación. Hay muchas bandas y violencia vinculada al narco, pero no hay guerras. Si se piensa en la guerra de los Contras, eso era geopolítica. Latinoamérica ha logrado un punto inflexión que es más importante que un súper ciclo (…) Pueden seguir adelante como una sociedad y no como una élite de poder”.
Junto con señalar que hay motivos para el optimismo y que ve avances que le gustaría ver en EEUU. “El sistema político norteamericano está controlado por los intereses corporativos y está corrompido. Uno saca una lección muy clara de eso: hay que sacar el dinero del circuito político (…) Tenemos una Corte Suprema que no sabe distinguir entre libertad de expresión y el manejo del dinero. Hay que preocuparse de retirar la influencia del dinero en la política”.
La agenda organizadora
En la agenda post 2015, Sachs dijo que recomienda el concepto de desarrollo sostenible como idea organizadora. Con ello quiere prestar atención a tres cosas: crecimiento, inclusión social y sostenibilidad ambiental. “Tres objetivos en mente y tres instrumentos: vamos a necesitar políticas más complejas para alcanzar los tres objetivos”.
El segundo punto que enfatizó fue la necesidad de proteger el medio ambiente porque se verá tensionado. “Tienen tantos recursos que los buffers ambientales son grandísimos, no así otras regiones sobrepobladas que no tienen esa ventaja”.
El tercer punto que abordó fue la desigualdad social. “América Latina tiene una gran diversidad cultural. Hay grupos indígenas y monorías que necesitan voz para conservar su espacio, su lengua y territorio”.
El cuarto punto fue la tecnología de la información como la mayor revolución en productividad. “Yo creo que esta revolución es tan fundamental como la máquina de vapor, porque ofrece avances profundos en todos los sectores de la economía: salud, nanotecnología, ciencia energética (…) En Asia de lo único que se habla es de tecnología, pero acá no tanto”.
Aterrizó el concepto poniendo como ejemplo la revolución de la fruta fuera de temporada, que se “debió al desarrollo del envase, de la tecnología del frío, a nueva infraestructura y a una gran inversión del gobierno como fue Fundación Chile”.
También se refirió a la inversión en tecnologías renovables, “ustedes tienen el desierto de Atacama y todos los medios para suministrar las necesidades energéticas de Chile a través de energía solar. Los precios de esa tecnología han bajado y van a bajar más. También está la hidroelectricidad en el sur (…) Se necesita todo tipo de energía bajas en carbono y ustedes deben abaratar los costos de producirla”.
Advirtió que el cambio climático viene y golpeará duro a todas partes del mundo. América Latina tiene recursos naturales y población más pequeña que otras áreas y va a manejar mejor este cambio que países como Siria o Yemen. “Aquí no habrá devastación”.
El quinto punto es el que definitivamente remeció a la audiencia: acceso universal a la salud y educación. “Quiero apoyar la educación universal para todos que impulsa la presidenta Michelle Bachelet porque es la clave para una sociedad más justa y para que ésta pueda aprovechar el mejor recurso que tiene como son las personas. Es la clave y llave del éxito democrático (…) En Escandinavia, tienen bajo desempleo, baja desigualdad, alta sustentabilidad ambiental e índices altos de felicidad porque invierten en el acceso universal para satisfacer todas las necesidad es de sus niños ya sea que nazcan en la pobreza o riqueza”.
El sexto punto que Jeffrey Sachs apuntó fue el potenciamiento de un polo industrial dado por Sao Paulo, Minas Gerais y Buenos Aires. “No hay muchos polos industriales en el mundo” y aunque el eje latinoamericano es el más débil, existe.
El séptimo punto al que puso atención fue el fin a la guerra contra las drogas. “EEUU ha externalizado a sus narcotraficantes y necesitamos una forma distinta de combatirla. Las bandas narcos controlan América Central. Hay miles de niños que huyen de México a EEUU para salir del daño”.
Eso lo llevó al octavo punto que da cuenta de la migración. “Cuando hay mucha desigualdad en los ingresos, los lugares ricos absorben a miles de personas. No se saca nada con tener fronteras abiertas, si no existe una política clara de migración”.
Por último, aludió a la cooperación regional. “La mayoría de las redes que necesitan los países deberían operar a nivel regional. Debería existir una matriz energética regional. (…) Entiendo y conozco las animosidades con Bolivia…, ustedes tienen mucha costa, denle un poquito y superen la guerra del 79. Eso provocará que puedan tener gasoductos y oleoductos”.
