Esta mañana, en la junta de accionistas de SQM, el controlador de la compañía, Julio Ponce rompió el silencio público que mantenía hace años. "Hace 28 esta empresa estaba prácticamente quebrada y hoy es una de las líderes a nivel mundial en su área", declaró.
Ponce, que esta mañana asistió a su última reunión como presidente del directorio de la empresa -cargo que ostentaba desde 1988- agregó además que "para mí lo más importante es el futuro de Soquimich. Muchas gracias".
El empresario, ante presión de la canadiense Potash, con participación de 32% de SQM y del fondo de inversión norteamericano Sailing Stone, propietario del 15%, prefirió dar un paso al costado luego de que cuestionaran seriamente su comportamiento ante las investigaciones por posibles delitos tributarios y financiamiento ilegal de campañas políticas.
De esa manera concluyó su intervención ante la junta. Ponce no aceptó preguntas de la prensa, que debió ver la transmisión vía streaming de la reunión desde otro salón. Lo que quisieran entrar a la junta, debían comprar acciones de la compañía.
