Como
El Mostrador Mercados reportó hace un mes, hay una creciente intranquilidad en los altos ejecutivos de Endesa España y Enersis.
La razón: la posibilidad de que Fulvio Conti no sea ratificado como CEO de la eléctrica italiana Enel en mayo, puede llevar a un cambio mayor en el gobierno corporativo y en la estructura de relaciones de confianza que han delineado los destinos de Endesa España y Enersis en los últimos cinco años.
De acuerdo al sitio español www.cincodiás.com, todo está dispuesto para que el nuevo gobierno italiano de Matteo Renzi dé a conocer la renovación de los consejos de administración de casi todas las compañías controladas por el Estado, y entre ellos está Enel, la controlador de Endesa España, Endesa Chile y Enersis.
Según la norma italiana, el Gobierno debe dar a conocer los cambios como máximo 25 días antes de que se celebren las asambleas, y según la prensa italiana Renzi los desvelará todos este fin de semana.
El capo de Enel es Fulvio Conti. Ya acumula tres mandatos y los medios italianos le otorgan pocas posibilidades de continuar. Entre sus posibles reemplazos, dice el sitio electrónico español, figuran tres hombres de la casa, en línea con las recomendaciones de los inversores: Francesco Starace, actual CEO de Enel Green Power; Luigi Ferraris, director financiero del grupo, y el de Andrea Brentan, consejero delegado de la filial Endesa y un nombre conocido en Chile, ya que fue parte del equipo que solucionó la polémica del aumento de capital de Enersis.
Según la prensa española, Brentan es la esperanza blanca para quienes aspiran a hacer valer el peso de la eléctrica española en el grupo, al que aporta el 40% del ebitda y casi todos sus activos latinoamericanos; asimismo, a los que aspiran a preservar una cierta autonomía o, en su defecto, a que una futura integración se realice ordenadamente.
Según sus defensores, su carácter multifacético y su conocimiento global del grupo lo avalan. El consejero delegado de Endesa ha sabido aprovechar el mejor entorno latinoamericano; ha aplicado una rigurosa optimización de costes y, sobre todo, ha sabido bregar en el duro entorno de la reforma eléctrica del Gobierno de Mariano Rajoy.
La salida de Conti puede significar un cambio mayor en el gobierno corporativo y en las relaciones de confianza que han delineado el destino de Endesa España y Enersis en los últimos cinco años o más. ¿Política? Por supuesto y de la más refinada.
De acuerdo a un análisis del Financial Times de hace una semana, la decisión de Renzi respecto de con quién reemplazar a Conti y al resto de los que manejan las grandes empresas estatales de Italia será leído como un mensaje de cuán comprometido está el joven premier en hacer cambios radicales a la manera en que funciona Italia.
