El seleccionador español explicó que en la víspera del trascendental choque ante Honduras, tienen «el grado de presión propio del partido» que deben afrontar, pero también sus rivales.
Vicente del Bosque, técnico de la selección española, comentó que entiende que pueda haber habido algo de «acidez» en la crítica tras la derrota ante Suiza, pero aseguró que para nada se considera maltratado, ni tampoco la selección.
«Es difícil hasta en la victoria tener a todo el mundo a favor, pero en este momento de derrota es verdad que hemos tenido un apoyo grandísimo de todo el mundo. Lo tengo que agradecer y es una responsabilidad mayor», aseveró.
«Naturalmente un poco de acidez tiene que haber porque hubo una derrota que no esperábamos», señaló Del Bosque, quien no cree que tenga que «luchar contra eso» porque «la crítica debe de ser libre, debe ser justa, y en ese sentido no me considero maltratado, ni la selección debe considerarse maltratada».
El seleccionador español explicó que en la víspera del trascendental choque ante Honduras, tienen «el grado de presión propio del partido» que deben afrontar, pero también sus rivales.
«Todos los jugadores son avezados, están acostumbrados a la alta competición. Prefiero estos partidos de máxima intensidad que aquellos que parecen fáciles. Aquí en este Mundial partidos fáciles hay muy pocos. Tendremos que esmerarnos. Como estamos viendo permanentemente los partidos son difíciles», dijo.
Del Bosque señaló que Honduras «posiblemente no se conforme con aguantar (en defensa) como contra Chile. Tendrán la oportunidad salir a delante porque quizá el empate también les sepa a poco».
«Tenemos que pensar que ellos también van a jugar al fútbol, que tienen sus cualidades. No nos van a poner un partido fácil y tenemos que contrarrestar su juego. No lo digo con un tono deferencial hacia ellos, sino ser deportistas y después nuestro ritmo, llevar la iniciativa y hacer nuestro fútbol», comentó.
«De antemano prever que va a ser una cosa fácil, en absoluto», continuó, «tenemos la conciencia de que primero tenemos que salir a impedir que jueguen ellos y luego a imponer nuestro juego».
El técnico español destacó que «en lo sustancial» no van a «cambiar mucho» la forma de juego habitual de estos últimos años, aunque sí que consideró que su equipo debe «estar un poco más atinado en la fase final del juego», «en la movilidad de balón» y en la «creación de espacios».
Ensalzó al cuadro hondureño, aseguró que Wilson Palacios está «haciendo un excelente recorrido en las islas» por su periplo en el Birmingham y el Wigan, así como a David Suazo, del que dijo que desde que llegó a Italia fue «muy prometedor» y es uno de los principales hombres del cuadro de Reinaldo Rueda.
Del Bosque insistió en que por lo que ha visto a Honduras en los partidos contra Chile e incluso el amistoso frente a Azerbaiyán, tan solo se puede tener en cuenta «la faceta defensiva», pero advirtió que tiene hombres suficientes para ser peligrosos por su «proyección ofensiva».
Recordó la marcha del Mundial y «el equilibrio permanente» que hay en la competición. «La superioridad no es fácil. Los repliegues de los equipos son máximos. No te dejan espacios y ahí aparecen las acciones individuales. Hay que mezclar todo el juego de conjunto para ser superior al rival y no está siendo fácil», añadió.
Cuestionado por los problemas que están teniendo grandes potencias europeas, como Inglaterra, Francia o Italia, señaló que no es en esta ocasión especialmente por cuestiones físicas.
«Es un asunto de todos los Mundiales y Europeos, en estas fechas es cuando se disputan. Es verdad que vienen todos los jugadores después de competiciones muy intensas, pero no creo que sea ese el problema, porque todos los jugadores tienen un gran talento físico. Es verdad que las selecciones nacionales cada día se van pareciendo más a los clubes y el orden defensivo se remarca mucho e impiden que los considerados mejores lo tengan fácil», agregó.
