La ministra de Obras Públicas, Loreto Silva, asistió a la comisión de Obras Públicas de la Cámara de Diputados para aclarar los errores detectados en la construcción del puente Cau Cau, en la comuna de Valdivia.
Ante los diputados integrantes de esta instancia, la secretaria de Estado explicó los alcances de la falla detectada en la construcción del primer viaducto levadizo en el país y las medidas adoptadas por el organismo para asegurar la reparación de los errores y en los plazos establecidos.
Al respecto, Silva insistió en que se trata de una obra que no está terminada, que fue un error detectado por el Ministerio de Obras Públicas y que el costo de las soluciones es responsabilidad de la empresa constructora.
La ministra señaló además que la empresa deberá cumplir con los plazos establecidos en el contrato y que de no hacerlo, será sancionada con multas y se aplicarán las otras exigencias que establece el contrato como es la ejecución de las boletas de garantía.
«Quiero dar tranquilidad en cuanto a que se trata de un error que es corregible, que se va a corregir, que como Ministerio de Obras Públicas hemos tomado todas las medidas para asegurarnos que la empresa cumpla con sus obligaciones y que esto no le va a costar ni un peso al Estado de Chile y por lo tanto, no le va a costar ningún peso a los chilenos», remarcó la autoridad.
Silva agregó que se están tomando todas las medidas para que esta obra finalice correctamente y pueda prestar el servicio para la cual fue pensada y soñada.
La autoridad hizo hincapié que «este error» fue detectado por el inspector fiscal del MOP y que la empresa pudo preverlo.
El diputado socialista Alfonso De Urresti señaló tras la exposición de la ministra que en este caso el nivel de vigilancia que es exigible al MOP no se cumplió porque con fecha 12 de diciembre se tuvo conocimiento de la situación que afectaba al puente Cau Cau y el día 6 de enero recién la seremi de OO.PP. aparece dando una versión sobre este hecho, la que además no correspondía a la realidad, porque dijo que los brazos del puente estaban puestos al revés.
«Esto claramente demuestra un desorden administrativo enorme en el Ministerio de Obras Públicas y particularmente una ‘dejazón’ en relación al inspector fiscal que estaba a cargo de esta obra», expuso el legislador.
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