La victoria por 3-1 sobre un discreto Strongest de Bolivia –que jugó 40 minutos con uno menos- le devuelve el oxígeno y las ilusiones en el Grupo 4 de la Libertadores.
Universidad de Chile obtuvo una importante dosis de oxígeno y alivio futbolístico para sobrevivir en la Copa Libertadores con una victoria esforzada sobre The Strongest de Bolivia, sumando sus primeros puntos en la tercera presentación en el marco del grupo 4, luego de caer ante Emelec e Internacional. Más allá del valor numérico de un triunfo que le devuelve sus posibilidades de clasificar, los azules mostraron mejorías en el nivel colectivo frente a un rival que dio lucha brava mientras estuvo en igualdad de condiciones y que, después, no supo resolver la desventaja decisiva generada por la expulsión de Veizaga.
El primer tiempo reflejó nítidamente la realidad futbolística actual de la U, alternando chispazos, desaciertos y una abismante irregularidad en el juego. Dentro de sus limitaciones, The Strongest mostró un interesante despliegue y orden táctico, pero su imagen latente era la de un equipo permeable a la presión del rival.
La primera alerta para los azules fue un mal pase de Gonzalo Espinoza hacia atrás que recibió como regalo Ramallo y definió con un zurdazo sobre el travesaño, enfrentando libre a Johnny Herrera. En esos minutos del primer cuarto de hora, los bolivianos amenazaron con sus mejores virtudes: los dos puntas, Ramallo y Escobar, aplicados y rápidos para encarar a pesar de la frecuente falta de acompañamiento.
En una de esas aventuras ofensivas, el Tigre de La Paz rescató la apertura de la cuenta, aprovechando un desborde de Wayar cuyo centro desde la izquierda definió Pablo Escobar con toque suave a los 16’. Sin embargo, el festejo duró sólo tres minutos, porque la U volvió a presionar y casi enseguida obtuvo la igualdad con un remate bajo de Gustavo Lorenzetti.
Para completar el cuadro de esta Universidad de Chile inestable y cambiante, de síntomas recurrentes, Pepe Rojas se ganó tarjeta amarilla por una falta y los reclamos posteriores. Y justo a los 45’, un centro de Ubilla dejó libre a Gustavo Canales para cabecear encima del arco, pero el goleador conectó deficientemente sobre el travesaño.
En la partida del segundo lapso prevaleció una actitud más agresiva de la U para buscar el arco contrario, especialmente con la velocidad de Ubilla por la derecha. The Strongest soportaba bien ese aluvión inicial, pero en la refriega del mediocampo sufrió una baja determinante cuando a los 55’ Veizaga derribó a Lorenzetti y la segunda tarjeta amarilla dejó a los bolivianos en inferioridad numérica.
Con cuarenta minutos por delante, la tarea parecía hacerse más expedita para el equipo nacional, y el técnico Martín Lasarte puso de inmediato a Cortés por Guzmán Pereira –un volante intrascendente- para aumentar el volumen ofensivo y meter a la visita en su área.
En un partido que abrió sus espacios, el juez colombiano fue “anestesiando” a The Strongest con tarjetas amarillas y la U siguió sumando recursos de ataque para buscar la victoria. Así entró Ramón Fernández y el vaivén constante se acentuó sobre la portería forastera –donde Vaca se iba agigantando-, con llegadas claras y otras favorecidas por el desorden defensivo del cuadro altiplánico.
Esa inercia del dominio universitario desembocó en una ventaja previsible. A los 71’, en otro mal retroceso de The Strongest, Rodríguez metió un centro al área y Ubilla apenas se elevó sobre un impávido defensa para clavar el cabezazo de la ventaja que la U necesitaba para soltar amarras con todo el viento a su favor… Seis minutos más tarde, el enésimo centro encontró libre a Canales para encajar el tercer gol con un remate cruzado en el área.
En definitiva, la expulsión de Veizaga destrabó las claves y facilitó el acceso de los azules a una victoria finalmente cómoda, que no tuvo las mismas licencias mientras The Strongest luchó once contra once. Luego de tantos pesares y dolores –incluso a la espalda de Lasarte-, los universitarios se dan un respiro y curan sus heridas gracias a un resultado que puede devolver sus signos vitales a un equipo aquejado de “hipertensión”…
Copa Libertadores
Estadio Nacional
Árbitro: Wilson Lamoroux, de Colombia
UNIVERSIDAD DE CHILE: Herrera, Magalhaes, González, Suárez, Rojas, Pereira (Cortés), Espinoza, Rodríguez, Lorenzetti, Canales y Ubilla (Benegas).
THE STRONGEST: Vaca; Wayar, Martelli, Cabrera, Torrico; Chumacero, Castro, Veizaga, Cristaldo; Escobar y Ramallo
Goles: 16’, Escobar; 19’, Lorenzetti; 71’, Ubilla; 77’ Canales.
Expulsado: 55’ Veizaga (TS)
