El solitario gol de David Pizarro marcó la diferencia entre unos pragmáticos azules y unos cruzados que jugaron bien pero no pudieron acabar con su mala suerte.
Habitualmente se dice que no importa como lleguen los equipos a los clásicos porque «es un partido aparte». La Universidad de Chile venía con un buen rendimiento, finalista de Copa Chile y peleando la punta del torneo. En el lado opuesto, la Universidad Católica buscaba salir de la mala racha futbolística que arrastra desde varias fechas. Y, a pesar de que el resultado refleja una victoria para la U por la cuenta mínima, la UC jugó mejor.
Durante gran parte del primer tiempo, los dirigidos de Mario Salas fueron protagonistas, mientras que la U apostaba solo al contragolpe. En una de esas funcionó, cuando el lateral argentino Fabián Monzón centró para que David Pizarro anotara el único tanto del partido a los 31 minutos.
El segundo lapso comenzó igual que el primero: con la UC atacando y los dirigidos por Ángel Guillermo Hoyos aguantaban las embestidas cruzadas, incluido un palo tras una gran jugada de José Luis Muñoz. Pero a diferencia del primer tiempo, la U se cansó producto del partido del miércoles por Copa Chile, pero no fue suficiente para que la Católica revirtiera su mala suerte.
Con este resultado, la U rompe una mala racha de 13 clásicos sin ganar, situándose en el tercer lugar de la tabla junto con Colo Colo con 21 puntos, a tres del líder Unión Española. Mientras que la UC se hunde al fondo de la tabla en duodécima posición con 10 unidades.
