Los partidos políticos españoles continúan analizando los resultados de los comicios locales y regionales del domingo y estudian posibles alianzas, tras despejarse la incógnita de la Comunidad Autónoma de Madrid, que podría ser gobernada por una coalición de izquierda.
Hasta confirmarse los datos con casi el cien por cien de votos escrutados, la región madrileña era una de las plazas más disputadas, ya que las primeras estimaciones otorgaban al Partido Popular (PP) y a su principal rival, el socialista (PSOE), un estrecho margen de diferencia.
El PP fue el más votado en la región, aunque los socialistas e Izquierda Unida (coalición de mayoría comunista) suman juntos más escaños en el Parlamento, por lo que una alianza de ambos podría desalojar del Ejecutivo a los conservadores, por primera vez en los últimos ocho años.
Además de Madrid, otras cinco de las trece regiones donde se celebraron elecciones dependen de pactos para la formación de nuevos gobiernos: Navarra, Cantabria, Aragón, Asturias y las Islas Canarias.
El Partido Socialista revalidó la mayoría absoluta en Extremadura y Castilla-La Mancha, mientras el PP que lidera José María Aznar podrá gobernar sin problemas en Castilla y León, Murcia, Valencia, La Rioja y Baleares.
El PP se proclamó también vencedor en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, en el norte de Africa.
Por lo que respecta a las municipales, los socialistas superaron en el cómputo global por algo más de 100.000 votos al PP, lo que les sitúa apenas un 0,4 por ciento por encima de sus rivales, algo que no ocurría en España desde hace diez años.
Sin embargo, en la práctica, el partido de Aznar mantendrá el control sobre la mayor parte de las grandes ciudades y consiguió incluso aumentar su mayoría absoluta en Madrid, alcaldía que rige desde hace 14 años.
Además de la capital de España, el PP gobernará importantes urbes como Valencia, Málaga, Zaragoza, Vitoria, Valladolid, mientras en Barcelona y Sevilla los socialistas fueron los más votados, pero tendrán que recurrir de nuevo a pactos para mantener ambas alcaldías.
El secretario general del PP, Javier Arenas, calificó hoy de «éxito rotundo» los resultados de su partido en los comicios, y llamó a la reflexión a la oposición, especialmente al líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, sobre su «fracaso».
Apuntó que la consulta fue «un éxito del PP y claramente un éxito personal» de Aznar y habló sobre la posibilidad de que esta formación pueda llegar a acuerdos en el País Vasco con los socialistas para arrebatar algunas alcaldías a los nacionalistas moderados.
A este respecto, Arenas dijo que la decisión quedará en manos del PP vasco, aunque adelantó que la estrategia «no va a sorprender a nadie» y confió en que «una posición coherente» de los socialistas permita llegar a un acuerdo.
En el País Vasco, donde sólo se celebraron comicios municipales, se registró un ascenso del voto nacionalista moderado que, según los observadores, atrajo a parte de los radicales independentistas de la recién ilegalizada Batasuna.
En las valoraciones de estos resultados también terció hoy el socialista Rodríguez Zapatero, para quien estos fueron los primeros comicios como líder del PSOE.
El dirigente opositor destacó la victoria «indiscutible» de su partido en las municipales y dijo que Aznar no ha superado el «plebiscito» que se planteó en esta consulta.
Consideró que ha obtenido «una victoria» en este «primer examen», por lo que afronta «con buen pie y en un muy buen punto de partida» los próximas comicios generales de 2004.
Tras la primera reunión de la dirección del partido después de las elecciones, Rodríguez Zapatero declaró que «cada uno es libre de poner los adjetivos que quiera a la victoria de los socialistas», pero ésta ha sido «clara» porque su partido recibió 200.000 votos más que el PP.
Izquierda Unida se mostró hoy «satisfecha» por los resultados obtenidos en las elecciones municipales y autonómicas y anunció que se ha convertido en «una fuerza determinante» en los gobiernos de comunidades como Madrid o Asturias», donde podrá pactar con el PSOE.
El coordinador general de esta formación, Gaspar Llamazares, destacó que IU ha pasado de un 6,5 por ciento de votos en los comicios de 1999 a un 8 por ciento este año, lo que también consideró un éxito.
