La detención de Sadam Husein por tropas estadounidenses, deja dos impresiones sobre las naciones involucradas: un Irak dividido ante el arresto del ex gobernante, símbolo de la resistencia antiyanqui, y un Estados Unidos promoviendo la captura como un »triunfo», lo que puede mejorar el apoyo popular a la administración de Bush.
Muchas áreas desconocidas para la opinión pública tiene la detención del ex presidente de Irak, Sadam Husein. Cuando unos 600 efectivos hallaron al ex gobernante malhumorado y negando toda vinculación con crímenes de lesa humanidad, sólo se comenzó a descifrar parte de las implicancias de un arresto que se negociaba hace semanas entre la resistencia iraquí y el gobierno de George W. Bush.
El ex líder de parte del mundo árabe se encuentra enfermo del corazón y fue drogado al momento de ser capturado para que no opusiera resistencia. Aunque niegan que esta acción fuera una captura -como lo promocionó la Casa Blanca, sino que más bien un arresto planificado-, aún no se conoce ciertamente en qué lugar está recluido.
Como salido de un Gulag, la semblanza de Husein era la de un Solyenitzin con más cabello. No era un arresto simple, y aún no se conoce el destino final de su encarcelamiento. Según fuentes con las que conversó El Mostrador.cl , la salud de Sadam es frágil, tiene un problema cardiovascular serio y, además, para conseguir su arresto debieron drogarlo para evitar su suicidio o resistencia que terminara con su vida.
Aisa Nahm, desde Amman, explicó que Sadam "no fue traicionado, ni la operación de inteligencia fue tan brillante como la exhibe la Casa Blanca. Con el mismo sentido práctico de elaborar un retiro escalonado de las fuerzas al comienzo de la guerra, la detención de Sadam hay que observarla en ese contexto", relató.
"En el fondo, Sadam ya era un lastre para las redes de resistencia instaladas. El lo sabía y conocía que la situación de su poder había cambiado radicalmente, en el momento en que una fuerza inmensamente superior invadió nuestro país", señaló.
Agregó que la entrega de Sadam, que los aliados llaman captura, para el efecto en el público, hay que verlo en la serie de negociaciones entre fuerzas iraquíes y fuerzas aliadas para minimizar el costo social y económico de una confrontación. Todas estas negociaciones fracasaron como quedó demostrado con el pacto de no confrontación por parte del General en Jefe de las Fuerzas Armadas iraquíes en febrero, que no fue acreditada por la Casa Blanca en su oportunidad. El arresto de Sadam es tardío y simbólico e internamente puede hacer más daño a la ocupación. Sólo sirve para la reelección de Bush", añadió.
Salvavidas para Bush
Los 600 soldados rodeando el lugar donde se encontraba el ex líder iraquí, demuestra que el arresto estaba ya concertado entre las fuerzas de inteligencia, principalmente la CIA, y una facción de miembros de la resistencia que sostenían que Sadam debía sacrificarse y entregarse. "Aún no hay versiones creíbles del lugar exacto donde fue arrestado y son todas especulaciones", sostuvo Leena Ismail, desde Amman.
En el sofisticado mundo político iraquí " traiciones de ese tipo no existen; lo que hay son modalidades de hacer las cosas y una capacidad de decidir con objetivos claros y precisos. Los iraquíes son proclives a su propio pragmatismo en política y en negocios, si por pragmatismo se entiende to deal with things as they come, es decir, abordar las cosas según como vengan", consignó.
Leela Ismail afirmó que en Irak las cosas van a continuar igual. "Nada va a cambiar , en cuanto a la resistencia y a la ocupación", dijo.
Esto lo corrobora una mirada a los periódicos árabes de la región que lamentan, en general, la pérdida del único árabe que se enfrentó a los norteamericanos. Ese fue el lenguaje en general de las editoriales de periódicos libaneses y árabes de la región.
Ante un nacionalismo herido por la invasión a Irak, ahora se debe enfrentar el arresto de Sadam que, si bien era repudiado por sus crímenes y mano de hierro para gobernar, era observado como un tipo de político que se había perdido en la región: determinante para mantener el principio de soberanía árabe en sus territorios.
Es por ello que los opositores a Husein ya están preparando un montaje mediático para un juicio público que será transmitido a nivel mundial.
Este montaje es quizás la última oportunidad para legitimar la ocupación. Es también la última chance que tiene Bush para salvar su presidencia y optar a la reelección con cierto margen y credibilidad a su favor. Una encuesta telefónica encargada por CBS a pocas horas del arresto, aún no difundida, pero a cuyos resultados preliminares tuvo acceso El Mostrador, tan sólo daba cuanta de un ascenso de un 10 por ciento de apoyo ciudadano a Bush, respecto de la última encuesta.
En este arresto curioso, pero no sorpresivo, estaban las llaves para resolver problemas políticos hasta hoy de lejana solución. Su ahora anunciado juicio público en Irak permitiría legitimar el Gobierno provisional iraquí y su proceso de elecciones libres, suspendido en la práctica por la situación de inestabilidad. Le daba respiro a una fatigada administración aliada plena de tropiezos, y le puede entregar una cuota de credibilidad a la justificación de la invasión.
Arresto planificado
Fue una acción perfectamente orquestada. Ya el 10 de diciembre con la formación del Tribunal Iraquí Para Crímenes de Guerra", estructurado por el Consejo Provisional del Gobierno Iraquí, la posibilidad del arresto de Sadam se veía inminente.
La detención estaba planificada en sincronía con la formación de este tribunal. La idea es que Sadam fuera juzgado en Irak para que el gobierno provisional, adquiriera más popularidad entre los iraquíes.
"No había ninguna chance de que para el próximo año los resultados en una elección de asamblea popular fueran a apoyar a los candidatos que participan en la ocupación", explicó Aisa Nahm.
El gobierno provisional, se ve cada vez mas alienado de las bases, y su accionar continúa agitando cada vez mas la fragmentación de liderazgos locales. El Consejo Provisional ya no resistía tanta presión. A pesar de un fuerte aumento de la actividad económica – como lo señala una fuente diplomática en Amman pues se importan aproximadamente entre 40 mil y 50 mil automóviles usados al mes en Irak- la tensión interna sigue.
Así lo confirman despachos de Reuters y AFP de la semana pasada, informando de la fragmentación y el caos reinante en las jefaturas de los caudillos religiosos de las ramas sunis y shiitas.
"Esta fragmentación y oposición al Consejo Provisional iraquí, no se toleraba más y debía suceder un hecho que tuviera un alto significado para salir del statu quo de violencia y caos", señaló Muhanned Raji, empresario iraquí opositor a Sadam descontento con la situación actual. Como Raji hay muchos y en su mayoría agrupados en la asociación de un "Irak para los Iraquíes".
La mayoría de los habitantes de ese país son parcos en las palabras. A raíz del arresto de Sadam, se podría esperar cierta "soltura de amarras" o "alguna algarabía". Pero nada de eso. En las palabras de Raji se destilaba una sensación de mayor incertidumbre. "Que va a pasar en el futuro… sólo Dios sabe", concluyó.
