Publicidad

«Lagos viene con el espíritu que tendrá el gobierno de Michelle Bachelet»

Parlamentario del MAS, colaborador de Evo Morales y que trabajó con Salvador Allende, cree que la presencia de Lagos en la asunción del líder indígena es una nueva forma de enfrentar las diferencias. Asegura que para terminar con la actual ‘ficción diplomática’, Chile debe abrirse a colocar el tema marítimo en la agenda de negociación.


El senador reelecto del Movimiento al Socialismo (MAS) Antonio Peredo trabajó durante cinco años en Chile. Un par de años para la agencia IPS y otros tantos como corrector de una enciclopedia que Salvador Allende tenía pensada publicar. Sin embargo, el golpe de Estado de 1973 terminó con el proyecto y con el periodista expulsado del país.



Sus lazos con Chile no se terminan ahí. Su sobrino, Peter Inti Peredo, de profesión neurocirujano, operó a la desaparecida presidenta del Partido Comunista (PC) Gladys Marín en el instituto Karolinska de Suecia.



El legislador también es hermano de Guido Inti -padre del médico- y Roberto «Coco» Peredo, quienes se unieron a la guerrilla que el Ernesto «Che» Guevara dirigió en Bolivia. Roberto murió diez días antes que el Che, mientras que el primero, dos años después, en una emboscada en La Paz.



En entrevista con El Mostrador.cl, Antonio Peredo asegura que conoce y que estima al pueblo chileno. Y que por lo mismo entiende, aunque no comparte, las razones por las cuales históricamente la elite política de Chile se ha opuesto a negociar una salida marítima para Bolivia.



Sin embargo, cree que el gesto del Presidente Ricardo Lagos, de asistir a la toma de posesión de Evo Morales de este domingo, transformándose en el primer gobernante chileno que participa en un acto de esta naturaleza en Bolivia, representa una nueva mirada en las relaciones entre ambos países, y que espera se profundicen durante el gobierno de Michelle Bachelet.



"Yo he vivido cinco años en Chile, quiero al pueblo chileno. En el tiempo que yo estuve las clases dirigentes no entendían el problema boliviano y reivindicaban un patriotismo muy cercano. Y digo muy cercano, porque no lo califico de patrioterismo, porque tienen razones, pero razones que no toman el sentimiento de los pueblos y las razones lógicas no siempre son las razones justas", sostiene.



Lagos y ficción diplomática



Este domingo el Presidente Lagos estará en la ceremonia del cambio de mando, ¿es suficiente ese gesto por parte de Chile para el reestablecimiento de relaciones diplomáticas?

– La presencia del Presidente Lagos en Bolivia reviste, desde mi punto de vista, un principio auspicioso de una nueva forma de encarar el diferendo que existe entre nuestros países, que durante cuarenta años vivimos una ficción de relaciones diplomáticas rotas



-¿Cómo es eso?

-Ficción en todos los aspectos, porque el nivel de relaciones de nuestros países es muy grande, porque el comercio de Bolivia hace la prosperidad del Norte chileno, porque el Norte chileno tiene las vivencias y las costumbres del pueblo boliviano, porque los cónsules que hay en nuestros países sabemos que tienen el rango de embajadores, no pueden ser menos.



Vivimos una ficción, porque muchos de nuestros profesionales se han educado en Chile y muchos profesionales chilenos se han educado en Bolivia. Tenemos que terminar con esto porque la reivindicación marítima de Bolivia, es una reivindicación que tiene que ver, incluso, con el desarrollo de Chile y creo que esa conciencia ya está entrando en sus clases dirigentes, que sin solucionar este problema, se va a quedar aislado del resto de América Latina.



-¿Qué paso concreto o qué señal se debe dar para entender que estamos frente a una nueva etapa diplomática?

-El paso concreto es muy claro: el gobierno chileno, no éste, sino que los gobiernos chilenos se han negado permanentemente a poner el tema marítimo en la agenda de negociación de nuestros países, eso tiene que abrirse para que las relaciones establezcan su normalidad. Atribuyo la visita del Presidente Lagos, a que se está produciendo un cambio importante. Diría que él está viniendo con el espíritu que va a tener el gobierno de Michelle Bachelet.



Rol de Perú y acto en Tiwanaku



-¿Y qué rol debe jugar Perú en esto, también tiene mucho que decir?

-Lógicamente que este es un problema que no se va a resolver solamente entre Chile y Bolivia, es un problema mucho más amplio. El tratado de Ancón le puso un candado a esta situación y sabemos que el Perú tiene que poner su parte también. Pero, además de eso, la reivindicación marítima de Bolivia tiene que ver con la integración Latinoamericana.



No se olviden que recientemente se trató de hacer un anillo energético para aislar a Bolivia y eso fue obra de las clases dirigentes chilenas, que finalmente se dieron cuenta que no pueden hacerlo. Para contar con la integración tienen que pensar en Bolivia y no puede ser de otra manera, somos países vecinos, somos países hermanos.



-Finalmente,¿cuál es su interpretación histórica de la entronización de Evo Morales en Tiwanaku. Muchos de bolivianos le dan, incluso, mayor relevancia que al acto de traspaso de mando que se realizará en el Congreso?
-Creo que en la médula de este hecho, estamos asistiendo al vuelco de una historia que puede ser muy similar a la historia del pueblo español que después de 700 años, logra expulsar a los árabes del suelo hispano y comenzar su propia historia. Creo que estamos ahora comenzando la historia propia del pueblo americano.



Excusas



Pese al cariño que siente hacia Chile, el senador Peredo cree necesario que Evo Morales postergue una visita al país hasta que no reciba disculpas públicas de parte de los personeros y organizaciones política que impidieron su venida hace dos años.



En enero de 2004, sectores de la Concertación y de la Alianza pidieron declarar, cada uno a su modo, "persona non grata" a Morales, quien tenía previsto visitar el país para participar en el seminario «Océanos, América del Sur y Desarrollo Sustentable», organizado por la Fundación Oceana, que dirige el chileno Marcel Claude.



El rechazo a la presencia del actual mandatario boliviano se produjo a propósito de declaraciones suyas en las que sugirió que podría generarse un conflicto bélico entre Chile y Bolivia, cuestión que posteriormente el propio Morales se encargó de clarificar, al decir que era partidario de las soluciones pacíficas para resolver las centenarias diferencias limítrofes.



En caso que Morales acepte la recomendación de uno de sus más estrechos colaboradores, se complicaría su asistencia a la asunción del mando de Bachelet, en momentos en que Lagos realiza un potente gesto diplomático al cambio de mando.



"Evo Morales hace más o menos dos años estuvo invitado por organizaciones sociales (a un seminario) y hubo una reacción muy fuerte de la derecha, lamentablemente, acompañada por la mayor parte de los medios de comunicación", dijo Peredo a El Mostrador.cl



"(En consecuencia) creo que independientemente del reestablecimiento de relaciones, hay todavía pendiente una deuda de las organizaciones chilenas para con Evo Morales", añadió.



-¿Una suerte de disculpas públicas?
-Yo creo que sí.



-¿En ningún caso diplomáticas?

-No, no creo que sean diplomáticas, sino que un reconocimiento público de que en ese momento fueron, para decir lo menos, injustamente insultantes con un dirigente político indígena.



__________

Publicidad

Tendencias