Secretario general reconoció que "es siempre difícil conciliar la voluntad de una mayoría que ha sido postergada por muchos años y la voluntad de las autonomías locales, que también son muy importantes y muy significativas en ese país».
El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, dijo, al término de una reunión con los prefectos de cuatro departamentos de Bolivia, que tanto él como el organismo hemisférico "estaremos siempre a disposición de Bolivia para ayudar a resolver sus problemas, nunca para agitarlos".
Tras recibir en audiencia a Rubén Costas, prefecto del Departamento de Santa Cruz; Manfred Reyes Villa, de Cochabamba; Mario Cossío, de Tarija, y Ernesto Suárez, de Beni, Insulza anunció que conversará este miércoles con representantes del Gobierno boliviano y recibirá las opiniones que se viertan el próximo viernes en la sesión del Consejo Permanente de la OEA para adoptar una decisión sobre la forma en que se puede colaborar con Bolivia.
«Si el Gobierno de Bolivia coincide en la necesidad de una presencia del scretario gneral o de algún representante de la OEA, o estima que una delegación de alto nivel de la OEA puede ayudar, nosotros vamos a estar disponibles para hacerlo. Si no es esa la consideración, y se estima que nuestro organismo no debe ser parte de un proceso de reconciliación y de búsqueda de acuerdos, naturalmente no tendría ningún sentido nuestra presencia. No seremos nosotros los que le creemos ulteriores problemas a Bolivia", comentó.
El secretario general reconoció que "es siempre difícil conciliar la voluntad de una mayoría que ha sido postergada por muchos años y la voluntad de las autonomías locales, que también son muy importantes y muy significativas en ese país. Unir esos dos factores es la difícil tarea de quien quiera llevar a Bolivia por una senda de paz y de progreso, y todo lo que se pueda hacer precisamente en la dirección de conciliar intereses y forjar los consensos indispensables, será bienvenido por nosotros", dijo.
Luego de la reunión con Insulza, los prefectos bolivianos manifestaron haber entregado a Insulza "evidencia documentada que demuestra que el Gobierno del Presidente Evo Morales y la fuerza partidaria que él tiene en la Asamblea Constituyente, intentan aprobar una nueva Constitución Política del Estado solamente con los asambleístas oficialistas, desconociendo al resto de las fuerzas políticas del país así como el pensamiento de las regiones de Bolivia".
