Las autoridades apuntan que cada noche son destruidos unos setenta vehículos de media en todo el país, cifra que se duplica durante los fines de semana.
El número de vehículos quemados en Francia el año pasado superó los 40.000, según una estimación avanzada por el Observatorio Nacional de la Delincuencia y que recoge este miércoles el rotativo «Le Figaro».
A falta de la cifra concreta, que será conocida en breve, el presidente de ese organismo, Alain Bauer, se ha aventurado a dar la provisional de 40.000 coches destruidos en todo el año, de los que algo más de la mitad lo son por actos de violencia urbana.
La quema de vehículos es una constante cada fin de semana en Francia y ha adquirido especial relevancia en períodos específicos de agitación social, en especial en la periferia de las grandes ciudades.
Las autoridades apuntan que cada noche son destruidos unos setenta vehículos de media en toda Francia, cifra que se duplica durante los fines de semana.
Sin embargo, la destrucción de coches esconde otras motivaciones, ya que un tercio de ellos lo son por fraude a las compañías aseguradoras de automóviles.
En torno a un quince por ciento de los vehículos son quemados por delincuentes, que previamente los han robado y pretenden así destruir huellas y otras pruebas que pudieran incriminarles.
EFE
