Tras la caída del primer ministro, los líderes de la oposición conservadora de Italia, Silvio Berlusconi y Gianfranco Fini, solicitaron que se acuda a las urnas lo antes posible y sin experimentos de gobiernos técnicos de por medio.
El primer ministro italiano Romano Prodi acudió este jueves al Palacio del Quirinal, sede de la jefatura del Estado, para presentar su dimisión al presidente de la República, Giorgio Napolitano, tras haber perdido la confianza del Senado, informaron fuentes oficiales.
Con la crisis de Gobierno oficialmente abierta, el jefe del Estado abrirá un periodo de consultas para determinar los próximos pasos que, en principio, pueden ser dos: la formación de un Gobierno técnico, con el que aprobar una ley electoral, o la convocatoria de elecciones generales anticipadas.
Tras la caída de Prodi, los líderes de la oposición conservadora, Silvio Berlusconi y Gianfranco Fini, han solicitado que se acuda a las urnas lo antes posible y sin experimentos de gobiernos técnicos de por medio.
También dentro de la coalición de Gobierno que apoyaba a Prodi, la Unión, se han escuchado ya voces en favor de la celebración de comicios, como la del ministro para la Investigación y la Universidad, Fabio Mussi.
En caso de que Napolitano opte por esta posibilidad, tendrá que decidir si disuelve ambas Cámaras o tan sólo el Senado, eventualidad que, aunque no parece apoyar ningún partido, es una opción técnicamente posible.
«Este es sólo el primer tiempo, veamos el segundo. Veamos qué hace el presidente de la República», ha asegurado a la agencia de noticias ANSA el jefe de la Liga Norte, Umberto Bossi.
Mientras Prodi se encaminaba al Palacio del Quirinal, Berlusconi celebraba la derrota del primer ministro en el Senado, que hoy ha vivido una sesión plagada de sobresaltos, con desmayos e insultos incluidos.
EFE
