Según el diplomático, el asesor del gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva también expresó su deseo que el referendo marque «un punto inicial para un proceso de reconciliación entre los bolivianos» y le manifestó «el pleno respaldo de Brasil al proceso».
El asesor para Asuntos Internacionales de la Presidencia de Brasil, Marco Aurelio García, le transmitió este viernes al embajador boliviano, Mauricio Dorfler, el «firme apoyo» brasileño al referendo al que será sometido el domingo el presidente Evo Morales.
«Brasil hace votos porque el referendo se celebre en términos de paz y tranquilidad» y garantice la «preservación de la democracia» en Bolivia, dijo Dorfler tras la entrevista con García.
Según el diplomático, el asesor del gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva también expresó su deseo que el referendo marque «un punto inicial para un proceso de reconciliación entre los bolivianos» y le manifestó «el pleno respaldo de Brasil al proceso».
El referendo fue convocado por el propio gobierno para que los bolivianos se pronuncien sobre la revocación o continuidad en sus cargos del propio Morales y su vicepresidente, Álvaro García Linera, y de ocho de los nueve prefectos (gobernadores) del país.
Dorfler explicó que García se sumó a otras autoridades del gobierno brasileño que le han manifestado su apoyo al referendo, así como el deseo de que se celebre en forma pacífica y «dentro del marco legal en el que ha sido convocado», dijo.
El diplomático consideró que los observadores internacionales que se han trasladado a Bolivia para asistir al proceso del domingo serán «un aval fundamental» y destacó que Brasil participa en tres misiones.
«Estará representado en el grupo de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y en el del Mercosur, pero además ha enviado una delegación parlamentaria propia», señaló el diplomático.
«Brasil ha comprometido su apoyo y seguimiento al proceso, y su respaldo a la vigencia del Estado de Derecho en Bolivia», apuntó.
Dorfler indicó que en el gobierno brasileño el proceso también genera alguna «preocupación», sobre todo por los brotes de violencia que ha habido en los últimos días, que incluso obligaron a suspender una visita de los presidentes de Argentina, Cristina Fernández, y Venezuela, Hugo Chávez, a la sureña región de Tarija.
En Brasil, además del propio gobierno, también han manifestado su apoyo al referendo diversas organizaciones sociales y sindicales, como la influyente Central Única de Trabajadores (CUT), que celebró el pasado jueves un acto de «solidaridad» con Evo Morales.
«Frente a las amenazas de la derecha y la reacción contra los innegables avances sociales en curso en Bolivia, reafirmamos nuestro compromiso en la defensa del gobierno de Evo Morales, que representa la lucha común de los pueblos de América Latina», dijo el secretario de Relaciones Internacionales de la CUT, Joí£o Felício.
EFE
