La prensa tunecina ha pasado en silencio su estancia y tampoco se ha hecho eco de las amenazas proferidas contra la secretaria de Estado, hace días, por la organización terrorista Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), llamando a asesinarla mientras permanezca en el Magreb.
La secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, afirmó este sábado que Washington «alienta y apoya» las reformas políticas para consolidar la democracia en Túnez, país al que calificó de «amigo y estratégico».
Al término de una entrevista con el presidente tunecino, Zine el Abidin Ben Ali, la alta funcionaria norteamericana señaló a la prensa que otro de los temas tratados fue la cooperación en la lucha contra el terrorismo.
Túnez y EEUU cooperan en el intercambio de información sobre los grupos terroristas y tienen la misma preocupación por las actividades de la organización «Al Qaeda» y su rama argelina, el antiguo Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC), explicó Rice.
Refiriéndose a la visita que realizó a Libia, la primera de un Secretario de Estado norteamericano desde 1953, Rice indicó que «con toda franqueza no pensaba que algún día visitaría Trípoli, y considero que esa estancia representa una apertura en nuestras relaciones, por ello no es el final sino el comienzo».
Rice señaló que había informado a Ben Ali del contenido de las conversaciones mantenidas ayer viernes con el líder libio, Muamar Al Gadafi, y entiende hacer lo mismo en sus próximas escalas en Argelia y Marruecos.
Por otra parte, insistió en que «en un país como Túnez con el que tenemos una gran amistad, era lógico que habláramos de reformas y de política interna y regional; y la discusión ha sido intensa».
Según miembros de la delegación estadounidense, la dirigente norteamericana también evocó el problema de los derechos humanos en Túnez, aunque declinaron dar más detalles.
El Departamento de Estado de EEUU en sus informes anuales sobre derechos humanos critica a Túnez sistemáticamente y acusa a sus dirigentes, entre otras cosas, de reprimir a la oposición y no permitir una prensa libre.
La mismas fuentes norteamericanas señalaron que si Mauritania no forma parte de la gira que realiza Rice, ello obedece a que Estados Unidos, como otros países, condenó el golpe de Estado militar contra el presidente Sidi Uld Cheij Abdallahi, el primer jefe de Estado elegido democráticamente en ese país magrebí.
La breve visita de Rice a Túnez, que esta tarde proseguirá viaje hacia Argel, ha estado rodeada de un impresionante dispositivo de seguridad, que incluso ha obstaculizado el contacto de la prensa con su delegación.
La prensa tunecina ha pasado en silencio su estancia y tampoco se ha hecho eco de las amenazas proferidas contra la secretaria de Estado, hace días, por la organización terrorista Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), llamando a asesinarla mientras permanezca en el Magreb.
Razones de seguridad hicieron que se suprimiera una visita programada al cementerio militar norteamericano donde reposan los restos de militares fallecidos en la campaña de Túnez durante la segunda guerra mundial.
EFE