«Hago un llamado a todo el país -a ahorrar luz, pues- vivimos la sequía más grande que ha tenido Venezuela en casi 100 años», señaló el mandatario luego que el ministro de Energía, Alí Rodríguez, anunciara que se requieren inversiones por 4.000 millones de dólares para generar este año unos 4.000 megawatts adicionales.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, decretó este lunes «la emergencia eléctrica en el país» tras dar cuenta de que los niveles de las aguas de las hidroeléctricas «continúan bajando y acercándose a niveles críticos» debido a una severa sequía.
El gobernante anunció la firma del decreto respectivo al inaugurar su programa radial «Chávez de repente», una iniciativa de comunicación adicional a su programa de radio y televisión «Aló Presidente» que cada domingo complementa con «Las líneas de Chávez» que hace publicar en la prensa escrita oficialista.
«Se me ocurrió en estos días y aquí estamos, en el ‘Chávez de repente'» que, como lo indica su nombre, puede «salir al aire» en cualquier momento, «puede ser a las tres de la mañana», dijo al explicar que su iniciativa se inscribe en el marco de «la batalla mediática» que dice librar con «los medios de la oligarquía».
El decreto de emergencia eléctrica, destacó, permite al Ejecutivo el traspaso de recursos inicialmente destinados a otros sectores.
«Hago un llamado a todo el país (a ahorrar luz, pues) vivimos la sequía más grande que ha tenido Venezuela en casi 100 años», señaló luego de que el ministro de Energía, Alí Rodríguez, anunció que se requieren inversiones por 4.000 millones de dólares para generar este año unos 4.000 megawatts adicionales.
Rodríguez dijo el pasado fin de semana que el país ha ahorrado este año sólo un 4% de energía con el racionamiento que rige desde inicios de año, muy lejos de la meta de 20% que se ha planteado.
El Gobierno achaca la situación a una persistente sequía que ha vaciado la gigantesca represa de El Guri (oeste), responsable del 70% de la generación eléctrica del país.
En Venezuela, el Gobierno aplica desde enero un plan de racionamiento del servicio eléctrico de hasta cuatro horas diarias en algunas ciudades.
En Caracas, un primer cronograma de apagones programados fue cancelado en enero menos de 24 horas después de su aplicación, y desde el pasado 1 de febrero se aplica un nuevo plan de ahorro que obliga a comercios e industrias medianas y grandes a reducir su consumo eléctrico en un 20%.
La oposición a Chávez denuncia que la crisis es consecuencia de la supuesta improvisación y falta de inversiones oficiales en infraestructuras.
Chávez destacó durante la semana pasada la «cooperación» cubana, argentina y brasileña que recibe su Gobierno para enfrentar la crisis, lo que en los últimos días trajo a Venezuela al ministro argentino de Planificación, Julio De Vido, así como al ministro cubano de Informática, Ramiro Valdés.
«Han hecho todo un alboroto porque vino una comisión cubana a trabajar junto a nuestros técnicos el tema eléctrico (…) dicen que esto es traición a la patria, injerencia del imperio fidelista en Venezuela. Eso es colaboración, eso es cooperación», dijo el mandatario a propósito de la presencia de Valdés.
El ministro venezolano del sector destacó a su vez «la solidaridad» no sólo de Cuba, Brasil y Argentina, sino también de Rusia, China e incluso Estados Unidos.
Cuba, sostuvo, «tiene gran experiencia en materia de ahorro y eficiencia energética», y «ha establecido un sistema de generación que se sirve de anillos, que impiden, si hay un problema eléctrico en un lugar, que otro (sector) sea afectado», explicó.
En cuanto a Brasil, Rodríguez sostuvo que expertos de ese país «están rehabilitando las turbinas» de la represa de El Guri, y que Argentina ha presentado aportes para «el aprovechamiento» del potencial hidroeléctrico del caudaloso Río Caroní (sur).
Rusia y China a su vez, reveló, proveerán de plantas termoeléctricas que abastecerán a las industrias básicas, mientras que «fabricantes estadounidenses de balsas instalarán generadores de electricidad», afirmó sin más precisiones.
