El alto el fuego ha sido respetado en el terreno en las últimas horas, en las que no se han registrado ataques por ninguna de las partes, tras cinco días de acciones armadas en la que murieron quince palestinos y nueve israelíes, ocho de ellos en el atentado perpetrado el jueves cerca de la ciudad sureña israelí de Eilat.
El «acuerdo informal», como lo describieron a Efe fuentes de Hamás, implica que todos los grupos armados, incluidos los Comités Populares de Resistencia, se comprometen a «contener su actividad militar».
Las mismas fuentes insistieron en que el pacto incluye esta vez a todas las facciones armadas, a diferencia del anunciado ayer por la tarde y roto después tanto por las milicias, con el lanzamiento de dieciséis proyectiles, como por Israel, con un bombardeo en la franja.
Los Comités Populares de Resistencia, milicia a la que el Gobierno de Benjamín Netanyahu culpó del atentado, y cuyos líderes fueron asesinados justo después en represalia, anunció en un comunicado su compromiso «temporal» con la tregua. «Detendremos temporalmente el lanzamiento de cohetes por el interés nacional del pueblo palestino», señaló el grupo, que anoche rechazaba sumarse a la tregua al considerar que aún debía vengarse de la muerte el jueves de sus dirigentes y del hijo de uno de ellos en un bombardeo aéreo israelí.
La portavoz del Ejército israelí para medios extranjeros, Avital Leibovich, confirmó que no han caído proyectiles en el país en las últimas horas. Del último que se ha informado, fue lanzado a primera hora del día (7.30 hora local / 4.30 GMT) e impactó en zonas abiertas del consejo regional de Eshkol, sin causar víctimas. Durante la noche no se han registrado operaciones israelíes en la franja, al parecer debido a una decisión de gobierno de Netanyahu de seguir una estrategia defensiva para relajar la tensión.
La pasada madrugada, a las 03:00 hora local (00.00 GMT), Netanyahu convocó un encuentro de urgencia con los principales ministros y altos mandos de las fuerzas de seguridad. De acuerdo con la edición digital del diario «Yediot Aharonot», en la reunión, que duró una hora, el gabinete subrayó el carácter unilateral de la tregua palestina y dejó claro que seguirá actuando contra quien lance proyectiles contra su territorio. «Nosotros no firmamos acuerdos con Hamás, ni directa ni indirectamente. Israel está siguiendo la aplicación del alto el fuego. Si siguen disparando, responderemos en consecuencia», dijo por su parte a la radio militar del país una fuente de la oficina del primer ministro.
Israel responsabiliza al movimiento islamista Hamás de todos los ataques originados en Gaza, participe o no en ellos, porque gobierna el territorio desde hace cuatro años.
El presidente del Parlamento israelí, Reuven Rivlin, convocó para mañana una reunión extraordinaria de la Cámara para analizar la situación de seguridad en las zonas próximas a la franja, según la edición digital del diario «Maariv». En la agenda, destaca la exigencia de distintas poblaciones del sur de Israel para que se las dote del nuevo sistema de interceptación de cohetes Iron Dome (Cúpula de Hierro), que ha probado su eficacia en el terreno pero del que sólo existen dos baterías por su alto precio.
«No puede ser que un millón de personas queden expuestas cada vez que alguna milicia en Gaza se le ocurra tirar cohetes», se quejaba hoy públicamente el alcalde de una de las localidades cercanas a la franja.
Fabricadas por la empresa pública RAFAEL, la tercera batería entrará en funciones en octubre, mientras que las tres siguientes no estarán preparadas hasta 2012. EFE
