Publicidad

Supremo de Argentina rechaza extradición a Francia del responsable de la desaparición de dos monjas galas

Francia condenó al ex marino Alfredo Astiz Astiz a prisión perpetua en 1990 por el secuestro y asesinato de las dos religiosas, desaparecidas en diciembre de 1977 junto a la fundadora de Madres de Plaza de Mayo, Azucena Villaflor.


La Corte Suprema de Justicia de Argentina declaró hoy improcedente la extradición del ex marino Alfredo Astiz a Francia, donde fue juzgado y condenado en ausencia por la desaparición de las monjas francesas Leónie Duquet y Alice Domon durante la dictadura militar (1976-1983).

El Supremo consideró que «la jurisdicción penal argentina se está ejerciendo contra Astiz por los delitos y víctimas mencionados, sobre la base del principio de territorialidad», informó el Centro de Información Judicial.

En abril de 2010 un tribunal argentino ya había rechazado la extradición de Astiz, pero Francia recurrió esa decisión ante el Supremo.

Astiz es actualmente sometido a juicio oral en Argentina por la detención ilegal, tortura y desaparición de las religiosas francesas, entre otras víctimas de delitos de lesa humanidad cometidos en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), el más importante centro de detención del último gobierno de facto.

Francia condenó a Astiz en ausencia a prisión perpetua en 1990 por el secuestro y asesinato de las dos religiosas, desaparecidas en diciembre de 1977 junto a la fundadora de Madres de Plaza de Mayo, Azucena Villaflor.

Según confirmaron supervivientes de la ESMA, las monjas francesas permanecieron varios días cautivas en esa escuela, donde fueron torturadas antes de ser arrojadas al mar en los conocidos «vuelos de la muerte».

Los restos de Duquet fueron hallados en 2005 en una fosa común de un cementerio de la provincia de Buenos Aires próximo a la costa en el Océano Atlántico, pero Domon continúa desaparecida.

Astiz integró uno de los grupos de tareas de la ESMA por la que, según organismos humanitarios, pasaron unas 5.000 personas, de las que únicamente sobrevivieron poco más de centenar.

Fue expulsado en 1998 de la Marina y en 2003, tras la anulación parlamentaria de las «leyes del perdón», procesado por delitos de lesa humanidad.

También ha sido requerido por jueces de España, Suecia e Italia, donde en 2007 también fue condenado en ausencia a prisión perpetua por la desaparición de tres italianos durante la dictadura argentina.

Publicidad

Tendencias