Señor Director:
Su diario publica en el día de hoy una interesante noticia respecto de la opinión del Banco de Chile entregada a los mercados internacionales con los cuales se relaciona en sus negocios bancarios. En dicha opinión el principal banco privado de capitales chilenos y del principal grupo económico expresa una opinión de suma importancia, informando al mundo que un gobierno de Michelle Bachelet, que al parecer como la mayoría de nosotros vemos como muy probable, no afectaría en forma negativa al desarrollo del sector productivo del país y en particular del financiero, ya que las políticas propuestas por la candidata si bien introducen cambios ellos serían graduales y razonables.
Esta opinión, sin duda muy calificada, ya que tiene, al parecer, directo acceso al comando de la candidata, contrasta con otra que lo es aún más porque emana del Ministro de Hacienda que ha expresado hace algunos meses que las propuestas de la candidata Bachelet serían causal de temor en el mundo privado, afectarían la inversión y en general, disminuiría el ritmo de crecimiento que ha llevado el país. Las opiniones del señor Ministro sin duda han producido efectos en algunos sectores que él debe conocer, aunque la opinión pública aun no parece percatarse de ese enfriamiento por razones de política interna, pero sin duda la opinión del ministro ha afectado la Bolsa de Comercio que parece internalizar con su reiterada baja que el futuro no sería muy promisorio.
En antiguas épocas, en procesos electorales se conocían ciertas campañas conocidas como del terror y a veces tenían efecto. Hoy la globalización y la comunicación instantánea hacen imposible tener un discurso para dentro del país y otro cuando se consulta sobre el estado del país desde fuera. Esa dicotomía ya no es posible de sostener y resulta curioso que nos encontremos con esta disparidad de criterios.
Sería altamente conveniente que el comando de la candidata Bachelet aclarara esta materia importante y le señalara al país quien está en lo correcto, el Banco de Chile o el Ministro de Hacienda.
Ramón Briones E. y Hernán Bosselin C.
