Señor Director:
Históricamente el Estado de Chile se ha caracterizado por asignarle una insuficiente importancia a sus fronteras. No olvidemos que son más de 6.000kmts., de fronteras terrestres, compartidas con Argentina, Bolivia y Perú.
Gracias a esta política, el país perdió importante territorio en la Patagonia, que posteriormente se comprobó, era generoso en recursos naturales.
No obstante lo anterior, sucesivos gobiernos no han tenido una política estratégica que dé cuenta de la importancia y sensibilidad de los territorios fronterizos.
Por otra parte, también el Estado chileno, en general, solo reacciona cuando comunidades, tanto en el extremo Norte, como en el extremo Sur, que corresponden a Arica, Aysén y Magallanes, limítrofes con alguno de esos tres países, se levantan para reclamar por el abandono del gobierno central, respecto a materias de conectividad, comercio y desarrollo en general; servicios que no están en condiciones de proveer el sector privado y por lo tanto debe hacerlo el Estado.
Así por ejemplo, es doloroso apreciar cuál es el desarrollo de la Patagonia argentina y cuál, el de la Patagonia nacional.
Pero en estos más de 6.000kmts., de frontera y muy próximo a ésta, habita una cantidad ínfima de chilenos, lo que ha hecho que algunos gobiernos se desentiendan de sus problemas, porque no representan una fuerza electoral importante.
La vigilancia Policial de las Fronteras, de acuerdo a la Ley Orgánica Constitucional de Carabineros, le corresponde a esta Institución y bien valdría la pena examinar cuáles son los recursos que entrega el Estado para ello. Son cientos los pasos fronterizos no habilitados, por donde transitan quienes huyen de la justicia, también narcotraficantes, autores de contrabando, así como quienes sacan del país vehículos robados. A ellos se suma la posibilidad del ingreso de grupos terroristas, de armamento, droga, de civiles, policías y uniformados de uno de los tres países vecinos.
Sin perjuicio de la prevención delictual, hay que considerar que la sola presencia de Carabineros de Chile, constituye una expresión del ejercicio de la Soberanía Nacional, en lo que se denomina » hacer patria »
Sería deseable que los gobernantes trataran la realidad fronteriza y de las zonas extremas del país, con una visión estratégica de futuro, más allá de los cuatro años de ejercicio del poder político.
Lo anterior aparece como una necesidad imperiosa del Estado, que de no abordarse de forma responsable, los países vecinos, a futuro, pueden «sacar partido» de nuestra lenidad.
Alberto Cienfuegos Becerra
Ex-General Director de Carabineros
