Las notas de prensa indican que el nuevo ministro del Interior, Mario Fernández, en el comité político del lunes criticó duramente a la Nueva Mayoría por hacer primarias dentro del conglomerado. En otras palabras, por no tener la capacidad de ponerse de acuerdo para designar a un candidato vía negociación o designación en cada comuna. Es más, agrega la prensa, habría indicado que “en ninguna parte del mundo se realizan ese tipo de comicios dentro de un bloque”.
De ser ciertas estas afirmaciones, el gobierno y la Nueva Mayoría tienen un problema y serio, pues la opinión del ministro del Interior no es una más, es la de una persona que sabe de temas electorales y es el jefe político del gabinete, el cual presentaría serios déficits democráticos y una mirada desde el orden y no desde la participación, justamente en tiempos de participación.
El hecho de que sumadas todas las primarias de este domingo no se llegue ni al 28% de todas las comunas del país (93 en total), es decir, que tanto la Nueva Mayoría y Chile Vamos no hayan podido o querido hacer primarias en las 345 comunas del país, indicaría que la mirada del ministro Fernández no está sola. Llevado a electores, poco más de 5 millones (un 39% del electorado) pueden votar por alguna de las primarias legales y vinculantes que se desarrollarán este fin de semana.
En tiempos de desconfianza extrema con los partidos políticos, democratizar y abrir decisiones parece ser uno de los caminos para revertir esta tendencia, y el problema es que la mirada del ministro va justo en la dirección contraria, la de la negociación y el orden por sobre la transparencia de opciones y objetivos hacia los electores. Si muchos países no tienen primarias para alcalde es porque en la mayoría de ellos hay segunda vuelta entre primeras mayorías, siendo nuevamente la comunidad la que elije sus destinos. Para qué decir de bloques electorales que lleven 26 años: Chile debe ser tal vez el único.
Un elemento insólito de las opiniones del ministro es que, dentro de sus conocidos de la Universidad de Heidelberg, está el profesor y experto electoral alemán Dieter Nohlen, el cual siempre ha sostenido que, desde un punto de vista técnico, los sistemas electorales se reconocen por el modo en el cual el elector selecciona a sus candidatos y la forma en la cual se traducen votos en escaños. “No existe un sistema electoral óptimo –señala el experto–. Solo existen soluciones técnica y políticamente más aceptables que otras para países diferentes…”.
[cita tipo=»destaque»]La ciudadanía sospecha de la verdadera vocación de apertura democrática de los dirigentes políticos de los pactos tradicionales, observa cómo se comportan ante las primarias y cómo estas incomodan a sus partidos. Las frases del ministro serían la confesión de esta incomodidad a la participación, donde no queda otra que relevar las pruebas, pues ya sabemos la verdad.[/cita]
Una de las pocas cosas positivas del sistema electoral estadounidense son sus primarias, no tanto como instancia burocrática, sino más bien como un espacio de cultura política, donde se conversa de lo local y regional con los aspirantes a dirigir los destinos del país. El ministro tal vez no ha participado aún en los “Encuentros Locales Autoconvocados” (ELA) o reuniones políticas comunales que intentan mejorar el entorno. La tendencia mundial es tener más primarias, no menos. Es a abrir los partidos y no a cerrarlos.
La ciudadanía sospecha de la verdadera vocación de apertura democrática de los dirigentes políticos de los pactos tradicionales, observa cómo se comportan ante las primarias y cómo estas incomodan a sus partidos. Las frases del ministro serían la confesión de esta incomodidad ante la participación, donde no queda otra que relevar las pruebas, pues ya sabemos la verdad.
