Señor Director:
Desde su creación el Consejo de Monumentos Nacionales ha tenido que lidiar con la fuerte tensión entre su obligación de proteger los Monumentos Nacionales definida por la ley 17.288 y las múltiples fuerzas que por alguna razón lo amenazan, muchas de las cuales incluso surgen desde el mismo Estado y/o gobiernos de turnos. Esto es especialmente cierto en el campo de los monumentos arqueológicos, qué dada sus particularidades, habitualmente se suman a bienes caracterizados en los Estudios de Impacto Ambiental propios de la regulación medioambiental en Chile vigente. En la práctica esto significa que, por ejemplo, el equipo profesional de arqueólogos de la Secretaría Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales ha tramitado en lo que va corrido del año más de 2.200 casos a lo largo del país, lo que representa cerca de la mitad de la actividad de esta institución. Lamentablemente, en los últimos años y luego de un periodo en que el área de Arqueología de la Secretaría Técnica comenzó a afianzarse en términos de sus competencias profesionales, metodologías de trabajo y organización, la actual administración de la institución, encabezada por el Vicepresidente Ejecutivo del Consejo, increíblemente ha hecho lo posible por empobrecer dichas capacidades. Se ha removiendo o no renovando contrato a profesionales clave en la gestión y no se ha remplazado a otros que ha partido, en gran parte por el estresante y poco recompensado trabajo que aquí se realiza, normalmente en un ambiente laboral muy poco grato. A la vez, se ha cambiado la estructura de trabajo a una mucho menos eficiente en la tarea de buscar la protección de los bienes arqueológicos y donde los criterios técnicos terminan pesando más que los políticos y/o coyunturales.
Hoy la situación es extremadamente grave, ya que el diezmado equipo profesional de arqueólogos que aún ahí se desempeña está al borde del colapso, con nuevas amenazas de despidos a fin de año. Esta situación, que ha sido varias veces representada frente a las autoridades, sólo conduce a que en la práctica se vuelva inoperante la ley de Monumentos Nacionales en lo referente al importante patrimonio arqueológico de nuestro país, seguramente aumentando los conflictos como los ocurridos recientemente por los hallazgos arqueológicos asociados a importantes obras como la ampliación ruta 5 en La Serena, el hospital Salvador o el Mall Barón.
Luis E. Cornejo B.
Arqueólogo, Universidad Alberto Hurtado
Ex Consejero, Consejero de Monumentos Nacionales
