Señor Director:
Queremos llamar la atención sobre la carencia que tenemos en Chile para resguardar adecuadamente los derechos de niños que tienen condiciones especiales y que se encuentran en estado de vulnerabilidad.
Junto al Instituto de la Sordera Dr. Jorge Otte, estamos buscando desesperadamente un hogar que pueda recibir a uno de sus alumnos más queridos, que se encuentra en situación de abandono.
Se trata de un niño de 13 años, sordo, sin posibilidades de revinculación con su familia, quien desde los 4 años ha tenido que vivir en tres hogares distintos, derivado de Tribunales de Familia.
Actualmente está en el Hogar Laura Vicuña y nos han avisado que cerrará en septiembre próximo.
Por razones de mínima dignidad este niño necesita vivir en un ambiente que lo acoja, que comprenda en su total dimensión, y le proporcione los medios para que pueda trasladarse de lunes a viernes al Instituto de la Sordera, en San Joaquín, donde recibe cariño, educación y las herramientas que necesita para poder desarrollarse plenamente y con autonomía a futuro.
Hemos concurrido al Tribunal de Familia, solicitando que no sea destinado a un hogar de la red Sename (nos han mencionado el CREAD Galvarino y CREAD Pudahuel), pues estamos seguros que no garantizan su integridad, ni una comunicación adecuada mediante el lenguaje de señas, así como tampoco su traslado diario al Instituto.
Hemos intentado que lo reciban en muchos otros hogares, sin éxito. Al parecer, no hay hogares en Chile que puedan tener a un niño sordo.
El Instituto de la Sordera está plenamente disponible para capacitar adecuadamente en lengua de señas a quienes asuman el hermoso desafío de acompañar a tantos niños sordos en condición de abandono.
Atentamente,
Francisco Ferrada Culaciati, Abogado
Bernarda Valdés Mena, Directora colegio Dr. Jorge Otte
Verónica de la Paz Calderón, Directora Ejecutiva INDESOR
