Señor Director:
En el marco de los apasionados debates en torno a temas de movilidad y transporte que suelen ocupar nuestra agenda, sobre todo en épocas como esta con largos feriados y “súper tacos”, quisiera proponer otro aspecto a la discusión.
Muchos teóricos han identificado que estamos viviendo un cambio de época, se habla de una tercera modernidad; modernidad líquida; modernidad reflexiva; sociedad postindustrial; sociedad del conocimiento, entre otros procesos de cambio multidimensional que detonan crisis de gobernabilidad y conflictos sociales que la actual institucionalidad -nacional, regional o local- no es capaz de gestionar. En las ciudades estos cambios ya son evidentes, en materia de movilidad se traducen en mayor congestión, contaminación, desregulación, nuevas desigualdades y exclusiones. Frente a esto, estamos perdiendo el foco. Más allá de la muy necesaria discusión técnica de ingenieros y expertos en transporte, existe un desajuste entre la opinión de estos, lo institucional y el territorio. La discusión está desfasada, los debates, más que apuntar a buscar soluciones técnicas para situaciones específicas, deberían apuntar a cómo nos gobernamos; cómo transferimos poder, competencias y recursos en el ámbito de la movilidad; cómo, quiénes y cuándo se toman las decisiones, y hacia cómo co-producimos política de movilidad en nuestro territorio.
Una nueva gobernanza de la movilidad tiene que ver con cómo los actores tomamos decisiones de manera coordinada. Se vuelve necesario un cambio rotundo y urgente desde la mirada gubernamentalista y experta del proceso, hacia una de gobernanza en red que gestione la coproducción de políticas, articule a los múltiples actores -público, privado y sociedad civil-, determine enfoques multinivel e incorpore la mirada multisectorial. Son numerosas las asociaciones, fundaciones, organizaciones territoriales y temáticas que ya están en esta línea y demandando participar de forma íntegra en el proceso, se puede destacar el Observatorio de Movilidad Urbana Sustentable, SUMO, la Red Ciudad Futura, Muévete, La Reconquista Peatonal, Transporte Justo, Coordinadora la Reina, Junta de Vecinos Ciudad Satelite de Maipú, Indepecleta, por nombrar algunos ejemplos.
Por sobre el debate polarizado, la buena noticia es esta: existe la demanda no solo por participar, sino por colaborar, coproducir y ser parte de todas las instancias en la toma de decisiones. Las ganas y conocimientos están, solo tenemos que ponernos de acuerdo e innovar en nuestra gobernanza de movilidad. Este cambio de época o “tercera modernidad”, se presenta como una ventana de oportunidades en torno a las nuevas tecnologías, modos, infraestructura e intermodalidad, en cómo podemos construir nuevas visiones compartidas de ciudad.
Isabel Serra
Académica Universidad Diego Portales
Observatorio Movilidad Urbana Sustentable, SUMO
Red Ciudad Futura
