Señor Director:
No las estamos dejando vacunarse. No les damos la opción. No las dejamos decidir.
Pese a la evidencia de que, lamentablemente, el embarazo es un factor de riesgo para desarrollar un cuadro grave en caso de COVID-19.
Pese a que la evidencia es cada día más abundante y tranquilizadora en cuanto a la seguridad de inmunizarse durante la gestación.
Pese a que en otros países las personas embarazadas se vacunan.
Pese a que las principales entidades de salud a nivel mundial han apoyado la inmunización de gestantes en caso de que los beneficios superen los riesgos.
Pese a que la Sociedad Chilena de Obstetricia y Ginecología envió dicha información al Ministerio de Salud en febrero pasado…
¿Qué pensaríamos si fallece una embarazada, que por edad o factores de riesgo le habría correspondido vacunarse, pero el gobierno se lo impidió? ¿Qué diría el mundo, que tanto ha mirado a Chile durante estas semanas?
Sin modificaciones en las directrices sanitarias y atendiendo a la preocupación que a diario escuchamos por parte de miles de gestantes y sus familias, distintas agrupaciones dedicadas a la salud de la mujer, hemos hecho llegar directamente hace unos dias, nuestra preocupación a las autoridades correspondientes. Nos hemos ofrecido para trabajar en conjunto y estaremos disponibles para cada paso del camino. Sólo falta acordar un plan de trabajo.
Cada mujer, embarazada o no, debe tener derecho a tomar la decisión que considere correcta para su salud (y en este caso la de su hijo/a). La vacunación no es obligatoria para nadie. Confiemos en que cada una decida, con la información lo más completa y clara posible. Cuenten con nosotros para esto último.
Dra. Andrea Von Hoveling
Delegada en Chile para la Red Iberoamericano de Salud Reproductiva y Sexual
Miembro del directorio de SOCHEG