Un fondo creado para otorgar beneficios sociales a los afiliados al Colegio Médico terminó por convertirse en un rentable negocio para el gremio. Dadas las grandes sumas de dinero que ‘mueve’ esta caja, los dirigentes optaron por ampliar sus beneficios, pero con esto, rebasaron su propia reglamentación.
Los volúmenes insospechados de plata que hoy maneja el Fondo de Solidaridad Gremial del Colegio Médico poco tiene que ver con el que se creó en la década del 50′. El presupuesto del 2003 de este organismo interno de la asociación gremial supera los mil setecientos millones de pesos. Sólo de las utilidades de los préstamos se espera obtener alrededor de 300 millones, y en cuotas de los afiliados mil 282 millones.
Más de 10 mil socios cancelan mensualmente cerca de 14 mil pesos por concepto del fondo. Fue creado para solventar necesidades económicas y sociales de los miembros de la asociación, como seguro mortuorio, incapacidades transitorias, acción social y préstamos de "urgencia" y "especiales".
Las grandes cifras que comenzaron a manejarse con los préstamos sobrepasaron a las personas que administran los dineros. Esto ha hecho que algunos miebros connotados de la asociación gremial estén preocupados por cómo se esta manejando financieramente este fondo y planteen sus dudas respecto a la transparencia en la contabilidad que realiza la plana mayor del gremio a través de la gerencia general. Incluso algunos al interior del gremio no descartan que se haya evadido impuesto.
Fue el ex presidente del Colegio y actual diputado por el PPD, Enrique Accorsi, quien se decidió ampliar más los "giros" del fondo. Así, a los préstamos de "urgencia" y "especiales", establecidos en el reglamento del departamento de solidaridad gremial y bienestar, se sumaron préstamos "extraordinarios", los cuales pueden llegar hasta 5 millones de pesos.
Los préstamos "extraordinarios" se crearon cómo créditos de consumo, es decir se pueden pedir para adquirir bienes como casas, automóviles y viajes, entre otros. Los créditos "especiales" están dirigidos para solventar problemas de enfermedad, tratamientos, hospitalizaciones, adquisiciones de material médico.
Pese a que el reglamento establece que una de las vías de financiamiento del fondo son los préstamos a sus afiliados, no se encuentran normado los créditos «extraordinarios».
Según dirigentes del Colegio Médico, el total de dinero del fondo solidario que está en calidad de préstamo superaría los 4 mil millones de pesos, concentrando el mayor porcentaje los créditos "extraordinarios", doblando a los "especiales" y cuadriplicando a los de "urgencia".
Los intereses de estos movimientos de dinero han permitido al Departamento de Bienestar lograr jugosos dividendos y, de paso, incrementar los recursos en el presupuesto anual del Consejo General. El reglamento del departamento de Solidaridad Gremial y Bienestar del Colegio Médico establece que de esos dividendos obtenidos se pueden destinar al Consejo General del colegio «hasta un 30% de los intereses que produzcan sus inversiones".
Según explican abogados tributarios, es común que los departamentos de bienestar de las asociaciones gremiales actúen como una suerte de financiera para sus afiliados y les presten dinero.
"Tienen un mercado cautivo con necesidades de créditos y la mayoría de los gremios tienen los fondos como para comenzar a prestar plata. La acción no tiene nada de irregular", señaló un abogado consultado por El Mostrador.cl. No obstante, el profesional advirtió que cuando se trata de un manejo de este tipo tiene que realizarse con absoluta transparencia.
Otros abogados y contadores consultados coinciden en señalar que los asociados tienen que estar siempre en conocimiento sobre el uso que se les da a los dineros obtenidos con los créditos del fondo solidario. "Los afiliados tienen que saber si la plata paga impuesto o no, en qué se invierte, si existe contabilidad de todos los montos", remarcó un contador.
Consultado el Servicio de Impuestos Internos (SII) sobre la situación, el asesor comunicacional de la repartición fiscalizadora, Aldo Anfossi, aseveró que "el SII no se refiere ni comenta una situación específica de evasión de impuestos, si previamente no ha fiscalizado en detalle. Desde luego, frente a una denuncia responsable el SII tomará carta en el asunto y llevará adelante una fiscalización acabada de la denuncia en cuestión".
La tuición sobre los colegios profesionales recae sólo en la Justicia y son sus afiliados los que tienen que velar por ella. No obstante, caen bajo la supervisión de Servicio de Impuestos Internos (SII) en el entendido que no son entidades de lucro. También de acuerdo al decreto Ley N° 2.757, que establece las normas para las asociaciones gremiales, el artículo 16 se establece que:
"Los libros de actas y de contabilidad de la asociación deberán llevarse al día. Tendrán acceso a ellos los afiliados y el Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción, el que poseerá siempre la facultad inspectiva sobre los mismos. La cartera de Economía podrá ordenar, de oficio o a petición de cualquier asociado, la revisión de las contabilidades y libros de actas. Si detectare irregularidades constitutivas de delito, dicho ministerio deberá denunciar los hechos ante el tribunal correspondiente".
Desorden y nerviosismo
El manejo del fondo, y especialmente lo que tiene que ver con las utilidades de los préstamos, tiene preocupado a los dirigentes del Colegio Médico. Así quedó demostrado en la convención nacional que realizaron en abril pasado en Iquique, donde el tema de las "ganancias" generó acalorados debates entre los directivos. En la cita participaron los máximos directivos del gremio.
Incluso el presidente del Fondo de Solidaridad y timonel del Regional de Concepción, el médico Daniel Copaja, reconoció que sólo un día antes de su exposición sobre el fondo la gerenta del Colegio Médico, María Paz Gallo, le comunicó el destino de los "excedentes de los préstamos".
No obstante, la ejecutiva le advirtió a Copaja que las cifras no debían quedar por escrito. La razón sería porque estos no han sido detectados ni entregados a la empresa auditora, Ernst & Young.
La preocupación de los dirigentes en la Convención se centró en si las utilidades que dan los intereses de los préstamos podían reinvertirse en créditos o bienes. O si los intereses de los préstamos pagaban impuestos, porque hasta abril estos dineros eran "desconocidos" por la auditoría externa.
Incluso, algunos de sus miembros fueron más allá y calificaron el accionar del colegio en esta materia de "grave", por estar corriendo un alto "riesgo" desde el punto de vista legal.
Al término de ese debate, según se ha explicado, tomó la palabra uno de los abogados del Colegio Médico, Enrique Díaz, quien se manifestó sorprendido por la información de los excedentes de los préstamos y recalcó que esta situación pone en tela de juicio la legalidad con que debe "desenvolverse el gremio".
El tema mantiene preocupando al Colegio Médico. Entre las soluciones, se baraja modificar el reglamento del departamento de Solidaridad Gremial y Bienestar, y hasta la reformulación del fondo. También en su momento se estudió la posibilidad de crear un banco de médicos.
El Mostrador.cl tomó contacto con el Colegio Médico para tener su versión sobre estos manejos financieros. Sin embargo, a pesar de que la encargada de prensa del gremio se comprometió a dar una respuesta, ésta no se concretó.
