Personal académico y administrativo del plantel rechazó la existencia de dos hermanos en cargos directivos de la universidad. Aunque la Contraloría admitió que la contratación de parientes, en altos puestos, contraviene la Ley de Bases de Administración del Estado, los funcionarios siguieron en los cargos.
Una nueva pugna entre la asociación de funcionarios, académicos y el rector de la Universidad de Santiago (Usach), Ubaldo Zúñiga, se produjo en los últimos días. Esta vez, debido a la contratación en cargos directivos de dos hermanos entre sí que realizó la máxima autoridad del plantel. La situación, sin embargo, habría quedado solucionada ayer lunes, pues uno de los aludidos dejó finalmente su cargo.
Mientras los funcionarios argumentaban que tanto de la Contraloría General de la República como la contraloría interna del plantel objetaron el nombramiento de uno de los hermanos por contravenir la Ley de Bases de Administración del Estado, en rectoría se afirma que el directivo cuestionado no depende directamente de la Usach, por lo que ellos no habrían incurrido en ninguna irregularidad.
La molestia en la comunidad universitaria se sumó a la que existe desde el año pasado por las irregularidades detectadas en el uso de recursos del Servicio de Bienestar del Personal -que oficialmente debiera utilizarse para entregar beneficios a los empleados-, con el fin de solventar gastos de la universidad. Y además a la preocupación existente en el plantel por el uso de unos 800 millones de pesos de los fondos de proyectos de Mejoramiento de la Calidad de la Educación Superior (Mecesup), para el pago de sueldos.
El problema actual surgió luego que el rector Ubaldo Zúñiga nombró a Renato Aburto Baeza como director de Economía y Finanzas, el 15 de octubre del 2003. Aburto Baeza es hermano de Ricardo Santander Baeza, quien se desempeña como director de Docencia y Educación Continua.
La contraloría interna de la casa de estudios rechazó entonces la designación de Renato Aburto Baeza a fines de diciembre del 2003, pues a su juicio "transgredía las disposiciones contenidas en el Titulo III, párrafo 2 de la Ley 18.575 (Ley de Bases de Administración del Estado), ya que la persona referida es el hermano del director de Docencia y Educación Continua". Esto fue ratificado por esa misma entidad, en enero del 2003, tras una consulta del rector.
Ante esto, el rector puso término a los servicios de Aburto Baeza, desde febrero de este año. La medida fue comunicada a la jefa del Departamento de Recursos Humanos por el director general de gestión institucional de esa universidad.
Sin embargo, el mencionado directivo siguió desempeñando el mismo cargo hasta ayer lunes, lo que ha generado las críticas sobre la administración de la universidad, de funcionarios y académicos en conflicto con el rector. Así lo aclaró el presidente de la Asociación de Funcionarios, Patricio Olivares, quien señaló que la salida del funcionario fue comunicada oficialmente ayer por el propio Baeza y por el rector del plantel.
El problema pasa a la Contraloría
La Asociación de Funcionarios presentó en diciembre pasado un reclamo frente a la Contraloría General de la República para esclarecer el problema. A fines de febrero, mediante el oficio 07720, el organismo admitió que era una contratación al margen de la Ley 18.575. No obstante, consignó que la decisión adoptada por el rector "en derecho correspondía", ya que sí terminó con los servicios de Aburto Baeza.
La Contraloría General, en su aclaración, admite que hay una causal de inhabilidad según el Título III de la Ley 18.575, referido al principio de probidad. En particular, en el párrafo 2 se explica que no pueden ocupar cargos de la administración del Estado "las personas que tengan calidad de cónyuge, hijos, adoptados o parientes, hasta tercer grado de consanguinidad y segundo de afinidad inclusive, respecto de las autoridades y de funcionarios directivos del organismo de la administración civil del Estado al que postulan, hasta el nivel de jefe de departamento o su equivalente, inclusive".
Pese a la inhabilidad planteada por el organismo fiscalizador, la relacionadora pública del rector, Marilú Bravo, sostuvo que Renato Aburto Baeza se desempeña hoy como "asesor de proyectos de la Sociedad de Desarrollo Tecnológico (SDT), entidad de derecho privado, que si bien está ligada al plantel, es un organismo independiente".
Agregó que el cargo de director de economía y finanzas se encuentra »vacante» en este momento, por lo que, a su juicio, no habría incumplimiento de ninguna naturaleza.
Consultado por las acusaciones en su contra, el profesional aludido explicó a El Mostrador.cl que terminó con los trámites pendientes de la unidad que dirigía. Además, aseguró que al ser contratado "no tenía antecedentes" de que pudiera existir alguna inhabilidad para ocupar el puesto, debido a que su hermano ocupaba un cargo en la universidad, por lo que no se sentía responsable.
Dijo que al conocer las objeciones de la contraloría interna, las autoridades del plantel pusieron término de su contrato y que el puesto se encuentra "vacante".
Por su parte, el presidente de la Asociación de Funcionarios, Patricio Olivares, explicó su molestia el viernes pasado asegurando que la situación fue expuesta ante el rector en su momento, "pero no supo dar una respuesta clara".
En ese momento, Olivares dijo que el hecho constituyó "una falta de probidad por parte de las autoridades. El señor Aburto aún figura como representante oficial de nuestra universidad, pese a que la Contraloría General y la interna objetaron su nombramiento".
Según Olivares y los académicos miembros del "Frente por la Defensa de la Usach», lo más molesto de esta situación es que no pueda ser considerada un hecho aislado, sino que se sume a los pagos irregulares de sueldos detectados en el plantel, durante el 2001 y 2002. "Esto es pasar por encima de nosotros", remarcó.
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