Fuentes cercanas a la causa dijeron que el magistrado estaría pronto a cerrar la línea de investigación referente a los políticos vinculados al caso, lo que entrega un nuevo elemento de prueba de que ninguna de las víctimas de Spiniak reconoce haber visto a Gemma, como tampoco la existencia de la menor que supuestamente murió por las torturas, llamada Margarita.
Sin asidero real en la investigación quedó el testimonio de quien fuera llamada la testigo clave, Gemma Bueno, que involucró a un parlamentario de la UDI en la investigación que sustancia el ministro en visita Sergio Muñoz, por la red pederasta que proveía de menores al empresario Claudio Spiniak.
Así al menos da cuenta el pormenorizado informe entregado ayer al magistrado, por el equipo diligenciador del OS-7 de Carabineros, según lo hizo trascender una fuente a El Mostrador.cl.
Los policías llegaron ayer hasta el despacho del magistrado con un completo análisis de todos y cada uno de los momentos de la vida de Gemma Bueno: desde su niñez, sus familiares y, principalmente, los presuntos siete meses en que, según su versión, estuvo secuestrada desde octubre de 1998, hasta abril de 1999 en la casa del empresario. En ese lugar habría sido abusada por un político de la UDI y, de acuerdo a sus declaraciones, habría sido el actual presidente de la tienda, Jovino Novoa.
Sin embargo, las indagatorias hechas por la policía acreditan que durante esos mismos meses, la joven estuvo en distintos lugares de la Sexta Región y presumiblemente en el sur del país.
Paralelamente, se indicó en fuentes cercanas a la causa, que el magistrado estaría pronto a cerrar esta línea de investigación referente a los políticos vinculados al caso, lo que entrega un nuevo elemento de que ninguna de las víctimas de Spiniak reconoce haber visto a Gemma, como tampoco la existencia de la menor que supuestamente murió por las torturas, llamada "Margarita".
De esta manera uno de los elementos más poderosos de la investigación se vino abajo y se transforma en una causa de una de las tantas redes de pederastas que operaba en el centro de Santiago, llevando menores a la casa del empresario. Esta situación, si bien no es menos grave, no contiene los elementos mediáticos y políticos que la convierten en el escándalo hasta ahora conocido.
Sumado a ello, una vez que se conozca el resultado del desafuero de la diputada RN, Pía Guzmán, el centro de la noticia debería volver a cómo se iniciaron los hechos. Si existió una posible conspiración y ver cuáles son las responsabilidades de Gemma Bueno y el padre José Luis Artiagoitía (Jolo), pues de seguro la UDI querrá cobrarse una revancha de carácter civil en los tribunales, por haberlos vinculado en estos hechos.
En tanto, el ministro Sergio Muñoz, quien hasta ahora no se ha inhabilitado para concurrir al Pleno de la Corte de Apelaciones de Santiago, lo más probable es que ocupe el día de hoy (jueves) para realizar diligencias en la causa. Esto, debido a que tomaría en consideración esas leyes no escritas o las medidas de la "sana crítica" que lo hagan ventilar su criterio, respecto al caso cuando se produzca la votación.
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