7 julio, 2004

Alerce: Jueza entregó sobre sellado para garantizar seguridad de su familia

Por: El Mostrador

Las complicaciones no han terminado para Rosa Muñoz Gibert, ex jueza subrogante de Los Muermos. Hace pocos días entregó un sobre sellado en una notaría, que sólo puede abrirse en caso que algo pueda sucederle. Contiene antecedentes inéditos del episodio de violencia intrafamiliar que vivió este año, que dan cuenta de las conexiones de su ex cónyuge con algunas de las personas que le correspondió investigar.

"El senador Sergio Páez nunca me ha llamado", señala Rosa Muñoz Gibert, ex jueza (s) del Juzgado de Letras de Los Muermos, la misma que ordenó detener el pasado 10 de mayo al director nacional de la Conaf, Carlos Weber. En la actualidad ostenta el cargo de secretaria del mismo tribunal, luego que se decidiera designar como juez titular a Inés Recart, durante junio pasado.

Sin embargo, Muñoz Gibert admite que después de la detención del director nacional de la Conaf, "alguien anónimo dijo que me llamaba de parte del senador Páez. Era una voz masculina que llamó a mi celular, que muy pocas personas conocían su número y me señaló que por orden o instrucciones del senador tenía que dejar tranquilo a Lisandro Barriga".

Cierta o no la relación, esa llamada, posterior a las declaraciones del abogado Carlos Baraona, que indicó que Páez presionaba a las autoridades locales de Conaf, fue incluida entre las causales de inhabilidad que presentó la ex jueza(s) para no seguir conociendo del proceso por adulteración de guías de libre tránsito de la Conaf.

Otra de las razones está relacionada con amenazas de muerte que afectaron a un hijo y su nieta y que fueron de público conocimiento en mayo. Muñoz afirma que siempre ha planteado que "no tiene miedo a nada, ni nadie" y que sólo le preocupa la integridad física de su familia. Y que en relación a la llamada, donde se menciona a Páez, dice que la hizo saber a la Corte de Apelaciones de Puerto Montt, «porque podría hacerme perder la objetividad respecto de algunas personas que estaban siendo investigadas, ya que eventualmente alguien podría haberlas realizado».

A pesar de los antecedentes, la Corte rechazó las causales presentadas y ordenó que siguiera a cargo de las investigaciones, a la espera de resolver las peticiones relacionadas con otro juez o un ministro en visita. Al final, se optó por este último, labor que hoy ejecuta Hernán Crisosto.

Días antes de la inhabilidad, la ex jueza que ostenta un promedio de 6,99 en el proceso de calificaciones 2003 del Poder Judicial, ya había presentado un recurso de amparo por las amenazas de muerte, el que fue rechazado por la Corte de Apelaciones, debido a que correspondía ingresarlo a través del Ministerio Público de la región. Después del recurso, el ministerio del Interior gestionó la protección adicional a la jueza.

Violencia intrafamiliar y el caso

Sin embargo, Rosa Muñoz Gibert sabe que a pesar de estar fuera del caso que puso en el tapete el negocio de la tala ilegal de alerce, en la zona de mayor vulnerabilidad de la X Región (Fresia y Purranque), no está libre de nuevos amedrentamientos.

Es por ello que reconoció a El Mostrador.cl que la semana pasada entregó en una notaría, cuyo nombre prefiere no revelar, un sobre sellado que contiene una serie de documentos y antecedentes que sólo pueden ser conocidos por sus familiares más cercanos, en caso que algo pueda llegar a sucederle.

Muñoz Gibert señaló que dicha acción es de "carácter personal", y que no tiene por qué negar que efectivamente dejó ese sobre sellado.

En el sobre, Rosa Muñoz adjuntó documentos vinculados a la causa por violencia intrafamiliar que se inició este año en contra de su ex cónyuge y ex oficial de Ejército, Alvaro Casanova. La ex jueza admitió a este medio que durante los cuatro años de matrimonio con Casanova, fue victima de este flagelo, al cual decidió ponerle fin en marzo de este año y sobre el cual no quiere entrar en mayores detalles, ya que incluso le significó estar con protección policial.

Pero la causa por violencia intrafamiliar, por esas vueltas de la vida, tiene sus conexiones con el caso que le correspondió llevar en Los Muermos. Producto de la vida social de su marido, conoció en 2003 a un tal Daniel Vergara, amigo de Casanova, al que recuerda haberlo visto en algunas oportunidades reunido con su "ex", en el restaurant Dresden, de Puerto Montt.

En medio de las investigaciones de Los Muermos, que pretendían dilucidar quién adulteró las guías de libre de la Conaf y de dónde se sacaba madera de alerce no autorizada para completar esas guías, citó al administrador del fundo Esperanza, debido a que Forestal Sarao S.A., dueña del predio vecino, lo culpaba indirectamente de sacar la madera de su propiedad, para posteriormente blanquearla en su territorio, ya que según lo indicado por Sarao, ellos ya no tendrían madera muerta para extraer.

Para sorpresa de la ex jueza, el administrador resultó ser nada menos que el mismo Vergara, que como adelantó este medio, trabajó como hombre de confianza para el ex director de la DINA, Manuel Contreras, en su fundo El Viejo Roble, de la comuna de Fresia. Si bien el fundo Esperanza lo administra Vergara, la propiedad de 14 mil hectáreas pertenece a Angel Lagormarsino, quien actualmente reside en Viña del Mar y cuyo hijo Alex era dueño del edificio que arrendaba el local a la desparecida disco Divine de Valparaíso.

Cuando Vergara fue contactado por este medio, admitió su relación con Manuel Contreras y además señaló que efectivamente había sido interrogado en Los Muermos y que toda su contabilidad había sido incautada en el marco de las investigaciones.

Este ex oficial de Ejército dijo en aquella oportunidad que su fundo se hacía cargo de un conflicto "político social", ya que tenían mucha gente pobre viviendo en forma irregular en su predio, para lo cual ya había iniciado conversaciones con José Nelson Schwerter, alcalde de Fresia, para ver de qué forma se podía erradicar a la gente del fundo.

Por su parte, Schwerter y, de acuerdo a lo indicado por comuneros de Llico Bajo, en Fresia, también había declarado reiteradas veces en el proceso de Los Muermos, ya que tiene camiones para el transporte de madera y una barraca.

Sobre estos aspectos Muñoz no se pronuncia, "por ser antecedentes del sumario". Lo que sí explica es que Casanova fue compañero de Vergara en la Escuela Militar, en los años 70. "No son conocidos, son amigos", agrega.

Pero las relaciones de amistad se extienden también a otro ex oficial de Ejército, Gonzalo Marchessi, actual fiscal de Conaf en la X Región, encargado de llevar los casos por tala ilegal. Cuenta Muñoz que todos ellos frecuentan un circulo de ex oficiales conocido como las Aguilas Blancas, en Puerto Montt y que si dio a conocer estos antecedentes fue "no para juzgarlos, sino para que sean conocidos en honor a la transparencia".

Otros de los antecedentes personales incluidos en el sobre están relacionados con los recursos de amparo presentados en su contra por Carlos Weber, el único votado favorablemente por la Corte de Apelaciones y los otros tres interpuestos por los funcionarios de la Conaf y votados en contra. Además, en el sobre incluye otro material personal que no prefiere revelar; "sólo hasta ahí puedo contarle", sentenció.

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