Una serie de reuniones se realizan por estos días en la Universidad de Chile con el fin de llegar un acuerdo que permita a la izquierda enfrentar "unida" las próximas elecciones de la FECH. De concretarse la idea, el pacto amenazaría con dividir nuevamente a socialistas y democratacristianos. Comunistas se marginarían del consenso por órdenes del »partido».
Los estudiantes de la Universidad de Chile que se identifican con los valores de la izquierda no quieren este año cometer nuevamente el error de fragmentarse en una infinidad de listas para permitir que la Presidencia de la FECH quede en manos de un independiente cercano a la derecha. Por eso, cuando el día 8 de octubre finalice el plazo para inscribirse, esperan que las listas sean las menos posibles.
Cabe recordar que el año pasado de las siete listas que se presentaron para ocupar la directiva de la federación, cinco correspondían a corrientes de izquierda: Surda, Fuerza Social, Partido Comunista, Partido Socialista y el MIR (Demetrio Hernández). En tanto, la derecha e independientes se agruparon en la lista "Unidos por la Chile", que permitieron posicionar a Luis Felipe San Martín a la cabeza de la FECH, con el 33,37 por ciento de las preferencias. Mención especial hay que hacer de la infaltable lista "fantasma" que acaparó el 1,62 por ciento de los votos del alumnado.
PC: ¿Alianza con el MIR?
Pero a pesar de los esfuerzos que realizarán los distintos actores políticos por la unidad, lo cierto es que igual existen diferencias al interior de la izquierda y ataduras que impedirían conformar una gran alianza. En esta situación se encuentra el Partido Comunista, que en la elecciones pasadas -con el 17,49 por ciento de la votación- logró ubicar a Sandra Saavedra Lowenberger en la Secretaria General de la federación.
Saavedra dijo a El Mostrador.cl que están realizando diversos tipos de reuniones para ver qué tipo de coalición se puede conformar: "Lo más probable es que vayamos con el MIR en una misma lista y paralelamente estamos conversando con la Surda". Pero la dirigente advierte que podrían existir obstáculos para una alianza más grande: "Nosotros no somos autónomos. Dependemos de las decisiones que se tomen a nivel central".
En ese sentido, el pacto con el MIR, que obtuvo el 3,1 por ciento de las preferencias en 2003, es el políticamente más factible porque se enmarca dentro del "Podemos", acuerdo político-electoral para las municipales firmado por el PC, los humanistas y el MIR; por lo tanto, todo lo que esté fuera de esa coalición sería inviable. Como cerrar un acuerdo, por ejemplo, con Fuerza Social, que reúne a los disidentes de la tienda de la hoz y el martillo, los cuales a su vez tienen claras posibilidades de unidad con los socialistas.
Fuerza Social
El año pasado, Fuerza Social, que a nivel nacional es orientada por el presidente del Colegio de Profesores, Jorge Pavez, concentró el 30,78 por ciento de los votos en los comicios, consiguiendo de esta forma colocar a Rodrigo Henríquez en la vicepresidencia de la Fech.
Contactado por este medio, Henríquez hace la precisión que en estricto rigor no se autodenominan como Fuerza Social: "No queremos que se nos identifique de esa forma. Aunque muchos pertenecemos a ella, no hay una ligazón directa. Es más, nuestra corriente surgió mucho antes que se conformará FS como tal. Preferimos diferenciarnos al interior de la universidad donde nuestra identidad es la de ser simplemente estudiantes de izquierda".
Henríquez asegura que "están en muy buen pie para que se logre la unidad que no hubo el año pasado en la izquierda". Al respecto agrega que en la segunda vuelta de las elecciones del año pasado, tanto la lista de la Surda como los socialistas, se bajaron para permitir que FS pudiera pelear la Presidencia. A pesar de lo tardía de la decisión, el dirigente señala que a partir de ese hecho las relaciones las tres agrupaciones se estrecharon y lograron realizar trabajos en conjunto durante este año.
Para la Fech, señala Henríquez, éste fue uno de los años en que más avanzaron las políticas de gobierno hacia la educación. Porque no existió un movimiento estudiantil fuerte y en el que las negligencias de parte de Luis Felipe San Martín, a su juicio, fueron evidentes: "Vale la pena recordar que a comienzos de año tuvimos la información muy tarde para discutirle al gobierno el alza de aranceles", puntualizó.
"Por eso San Martín se quedó sólo y se transformó en la promesa no cumplida. Lo que, en definitiva, puede significar que eventualmente ‘Unidos por la Chile’ no se presente como tal a las próximas elecciones", agregó Henríquez.
A título personal, este dirigente cree que la deficiente gestión de San Martín repercutirá en que la derecha no suba la votación en los próximos comicios. El año pasado "Unidos por la Chile", logró capitalizar el voto de la derecha histórica, el descontento que existía con la administración del ex PC, Julio Lira y el apoyo de los que se "creyeron el cuento que podía existir un líder apolítico, sin ideologías".
Al margen de las críticas y para que el 2004 no sea un año perdido, Rodrigo Henríquez plantea que quieren entrar a la discusión de la ley de la calidad de la educación, que recibió casi 800 indicaciones en el Congreso, por lo que ese proyecto está a fojas cero y existe un margen de maniobra en ese sentido.
La Surda, otro actor
A pesar del 4,86 por ciento alcanzado el año pasado y no tener un puesto en la directiva de la Fech, la Surda se ha transformado sostenidamente en uno de los poderes importantes en la casa de Bello. Una muestra de ello es que lograron alcanzar la secretaría general del Centro de Estudiantes de Derecho, logrando con ello bajar la votación de la DC, partido que perdió la presidencia.
Víctor Orellana, presidente del Centro de Alumnos de Ciencias Sociales y coordinador de la colectividad al interior de la universidad, es categórico respecto de la necesidad de la unidad de los sectores de izquierda: "No se puede hacer el papelón del año pasado. Estamos convocando a todos los sectores sin excepción para que nos presentemos en una sola lista".
Sin embargo, Orellana admite que quizás esto no será posible con los comunistas, por la existencia del Podemos. "Entendemos que no pueden romper con ese pacto y los respetaremos si ésa es su decisión". En cambio, reconoce que con quienes están muy "amigos" es con los socialistas, sector que acaparó el 8,71 por ciento de las preferencias de los alumnos de "la Chile".
El dirigente estudiantil plantea que desde el 2002 el movimiento universitario viene en "decadencia", lo cual en gran parte se debe a que el alumnado no ve en la política un mecanismo de solución a los conflictos. Por su parte, el actual Presidente no ha hecho nada para resolver la crisis de escasa participación: "El gobierno no recibe nuestras inquietudes. No encuentra una contraparte en el sector estudiantil".
«Concertación de izquierda»
La simpatías entre ambos sectores fueron ratificadas por el actual timonel de la juventud del partido Socialista (JS), Jaime Romero, quien señaló a este medio que pretenden "competirle con todo a la Alianza por Chile" y generar propiciar un escenario para la "concertación de corrientes de izquierda", más que una "concertación" entendida como sinónimo de alianza de gobierno. El presidente de la JS sabe que el camino es difícil: "Este año pretendemos crear una lista de convergencia. Es complicado el escenario, pero existe la predisposición. Estamos a tiempo".
En este marco de expectativas por doblarle la mano a cualquier cosa que huela a candidatos independientes apoyados por la derecha, uno de los partidos de la Concertación queda en la orfandad: la Democracia Cristiana, que el año pasado perdió el liderazgo del Centro de Estudiantes de Derecho y no se presentó a las elecciones de la FECH, porque a última hora los socialistas decidieron separarse de sus socios e irse con la Surda.
El representante de la Democracia Cristiana Universitaria (DCU) en la Universidad de Chile, Juan Pablo Leiva, lamentó la "desconocida" que les hizo el Partido Socialista. Pero asegura que no son rencorosos y que este año quieren nuevamente levantar una alternativa de la Concertación. Para lo cual hay logrado reclutar a sectores del PPD y del Partido Radical para que los acompañen en esta cruzada.
Leiva atribuye la descoordinación con los socialistas a la existencia de dos sectores en ese partido. Una facción blanda que estaba por ir en "Concertación" y otra más dura "que es la que se vincula a la Surda, "la Jota" y FS".
«Decés» a la expectativa
No obstante, los estudiantes de la "flecha roja" no serán tan ingenuos como en la ocasión anterior y están reuniendo todos los nombres para armar una lista en caso que los socialistas retiren sus nombres de una eventual alianza. En ese contexto ya ha definido hasta su presidenciable, el estudiante de Derecho, Alberto Precht, y han calculado en cerca de mil la cantidad de votos que podrían recibir. Cabe señalar que de un universo de 20 mil 374 estudiantes, sólo votaron 11 mil 167, lo que representó un 54,8 por ciento del electorado.
Sobre la gestión de Luis Felipe San Martín, el dirigente falangista ironizó al decir que fue como "tener un piloto automático a cargo de la federación. No hubo movilizaciones. No tuvo opinión cuando se produjo la crisis del alza de aranceles a comienzo de año. Ni se pronunció sobre el crédito universitario".
Para Leiva lo importante es fortalecer la Concertación. "Si eso no se logra no se dirá que no hicimos el intento. Pero nunca hay que olvidar que las elecciones de la federación generan síntomas de lo que sucederá en términos políticos. Por lo menos hasta la década de los ’70 fue un buen indicador".
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