Ministro Sergio Muñoz señaló que, de acuerdo a su investigación, no existen presunciones de que políticos hayan participado en la red pederasta, por lo que decidió a sobreseer a los cinco senadores que en algún momento fueron mencionados en el proceso.
Descartada definitivamente quedó la participación de políticos en la red de pederastia encabezada por el otrora empresario Claudio Spiniak, según una resolución dictada este viernes por el ministro que instruye el caso, Sergio Muñoz.
El magistrado, que sustancia el caso desde noviembre de 2003, señaló que de acuerdo a su investigación no existen presunciones de que políticos hayan participado en delitos de significación sexual contra menores.
«En autos se efectuaron imputaciones a distintas personas de hechos de significación sexual que, luego de realizadas las diligencias correspondientes, no aparecen presunciones que se hayan verificado los hechos que dieron origen a su investigación», señala la resolución del ministro.
Por lo mismo, el juez decidió sobreseer definitivamente a los senadores Andrés Zaldívar Larraín (DC), Nelson Ávila Contreras (PRSD), Carlos Cantero Ojeda (RN), Carlos Bombal Otaegui (UDI) y Jovino Novoa Vásquez (UDI), quienes habían sido mencionados durante la investigación.
El senador Novoa, uno de los principales perjudicados en el caso, destacó que «acá hay una resolución definitiva. La Justicia terminó su investigación y ha resuelto que no han existido los hechos que motivaron todo este escándalo y toda esta investigación».
El origen
La supuesta participación de políticos fue denunciada en octubre de 2003 por la diputada María Pía Guzmán (RN), quien aseguró que en las bacanales que el empresario organizaba con menores de edad asistían dos políticos, dos de la Alianza por Chile y uno de la Democracia Cristiana (DC).
Si bien en ningún momento mencionó nombres, al menos públicamente, su afirmación dio pie a una serie de especulaciones sobre los parlamentarios involucrados.
Sin embargo, fue una entrevista que la joven Gema Bueno, otrora testigo estrella del caso, lo que terminó por centrar la atención en torno al senador Novoa. Según el testimonio de Bueno, el legislador gremialista la sometió a abusos y actuó como su pareja durante varios meses.
Poco a poco la joven comenzó a entrar en contradicciones, hasta que finalmente el año pasado reconoció a través de dos medios de comunicación que todo lo que había señalado era falso, tras lo cual el magistrado la sometió a proceso por el delito de falso testimonio.
Su retratación también terminó por alejarla definitivamente de quien fuera su protector y presentara su caso ante los tribunales de Justicia, el sacerdote católico José Luis Artiaogitía, quien enfrenta los mismos cargos que Bueno.
Cierre del sumario
La decisión del magistrado se produce pocos después que el magistrado dictara las acusaciones contra los 14 procesados por delitos de connotación sexual contra menores. La situación judicial de ocho de ellos está agravada por los cargos de asociación ilícita.
Durante la investigación, el ministro estableció que en total fueron 21 las víctimas de la red y comprobó delitos como violación y abuso sexual, promoción e inducción a la prostitución infantil y producción de material pornográfico.
El principal es Spiniak Vilensky, a quien el magistrado le atribuyó la autoría de un delito de violación, cuatro de estupro, 20 abusos sexuales, 18 de facilitación de la prostitución infantil, además de producción de pornografía infantil.
La situación judicial de Spiniak se encuentra agravada por su procesamiento como autor de asociación ilícita, al igual que Pablo Abasolo, Héctor Torres, Miguel Carvajal, Miguel Quiroga, Walter Figueroa, Exequiel Martínez y Wilfredo Villarroel.
En tanto, sin la agravante de la asociación ilícita, están encausados Alejandro Espinoza Navarrete, Julio López Rojas, Felipe Silva Navarrete, Laura Quijada, José Alegría y Patricio Allendes Varas.
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