«Es corrosivo para la Concertación priorizar acuerdos con la derecha»

Confiado en que la política de los consensos se puede establecer con fuerza al interior de la Concertación se mostró el diputado socialista Marcelo Díaz, quien hace menos de un mes que asumió como primer vicepresidente de la cámara baja.



Díaz, al referirse al conflicto que se dio en el Senado por la nominación de Ramiro Mendoza como nuevo contralor, manifiesta que es indispensable establecer acuerdos en el bloque de gobierno porque de lo contrario la situación se puede complicar mucho más, especialmente ante uno de los principales desafíos del gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet: la agenda social.



En tal ángulo, su postura apunta a que el ministro secretario general de la Presidencia, José Antonio Viera-Gallo, se preocupe de fortalecer las confianzas entre los concertacionistas y mejorar la relación del pacto con el Ejecutivo.



-¿Qué le parece este logro legislativo que obtuvo el ministro José Antonio Viera-Gallo con la designación del nuevo contralor?
-Siempre y lo deseable es que el gobierno actúe con su mayoría y lamento que algunos senadores se hayan restado a la nominación del nuevo contralor. Sin embargo, es evidente que estábamos en una situación muy complicada y que se haya designado en menos de 48 horas es un buen punto de partida para el ministro Viera-Gallo.



-Para senadores de su colectividad, como Ricardo Núñez y Jaime Gazmuri, era necesario tener un político histórico como el ex parlamentario. ¿Usted coincide con eso?
-Yo fui bastante crítico con la manera que tenía la ministra Paulina Veloso de interlocutar políticamente, pero el acuerdo que se selló en el Senado ella ya lo tenía bastante avanzado y lo que hizo el ministro fue cosechar esas gestiones.



-No cree que la actitud de cinco senadores de la DC, el PPD, el PS y PRSD de oponerse tenazmente a la propuesta del Ejecutivo marca un mal precedente respecto a futuros proyectos
-Yo creo que esto refleja que la Concertación está pasando por un problema de desconfianzas y quizás éste es uno de los puntos centrales del desafío de Viera-Gallo. Es importante que el gobierno entienda que es necesario reponer las relaciones internas, porque hay una pérdida de confianza y afectos muy fuertes. Si el gobierno no pone eso como un tema fundamental en esta nueva etapa, estos problemas van a subsistir.



-¿Esta situación se puede extrapolar para la discusión de proyectos futuros?
-Lo que pasa es que si extrapolamos la situación del contralor, que dado el mecanismo perverso que establece la Constitución para designarlo, en los avances de los proyectos de ley eso es una bomba de tiempo para la Concertación.



Yo creo que los proyectos tienen que avanzar con las mayorías que la Concertación tiene en ambas cámaras y, en consecuencia, pienso que el ministro Viera-Gallo tiene la sabiduría suficiente para entender que no se trata de juntar mayorías para sacar los proyectos sino que consensuar al interior de la Concertación el camino para que las iniciativas avancen.



-¿Eso quiere decir que quizás Viera-Gallo no le hizo caso a los díscolos?
-No podemos sacar conclusiones generales del episodio en la designación del contralor, porque éste tenía una particularidad distinta por los mecanismos, por el bloqueo que nos encontrábamos y no puede sentar un precedente sobre cómo vamos a sacar delante la agenda legislativa. Nosotros, por ejemplo, como bancada de diputados socialistas le expresamos claramente a la ministra de Educación, Yasna Provoste, que se avance en la LOCE por las vías de acuerdo en la Concertación y no que se busquen mayorías circunstanciales entre algunos del bloque de gobierno y la derecha. Creo que un precedente de esta naturaleza es corrosivo para la solidez de la coalición.



Binominal y modificaciones



-¿Cuál es el debate que usted espera para que este proyecto pueda ser aprobado sin mayores conflictos en ambas cámaras?
-Bueno, yo espero que esto permita clarificar de cara a la opinión pública las posiciones. Se han dicho muchas cosas y por ejemplo el senador de la UDI Pablo Longueira, es el que más usado palabrerías en esta materia, por eso ahora tendrá que decir su verdad. Por otro lado, me gustaría que en el Congreso se discutan otras materias relacionadas con la iniciativa, que tienen que ver con que la exclusión no se reduzca simplemente a la cámara baja sino que también en el Senado.



Obviamente para presentar indicaciones hay que tener el patrocinio del Ejecutivo y nosotros esperamos contar con ese apoyo para poder debatir esto en el Senado.



-En ese sentido, ¿cómo esperan enfrentar el tema considerando que hay varios senadores de la Concertación y la derecha que no están de acuerdo con modificar el sistema en esa rama del Congreso?
-Todas las posiciones son legitimas, para eso será importante el rol del Ejecutivo, porque si éste no patrocina indicaciones que apunten en esa dirección será complicado iniciar una discusión. No tiene ninguna lógica y es absurdo plantear que vamos a acabar con la exclusión sólo en la cámara baja y el Senado quedará aislado, como si fuera un extraterrestre, cuando no lo es.



-¿Qué actitud espera de la derecha en esta materia, considerando que sus parlamentarios han dicho que este tema no es prioridad para el país?
-Ese es un argumento que siempre esgrime la derecha en los temas que no le gusta. Eso es pura demagogia y populismo porque no hay nadie en el mundo que no pueda hacer dos cosas simultáneamente. Las energías de la agenda social no se van a debilitar porque debatimos el proyecto de reforma al sistema electoral Para mí eso es una excusa barata de la derecha para evadir el tema de fondo.



-¿Usted cree que los líderes de la derecha, como Sebastián Piñera y Joaquín Lavín, deberían llamar a sus parlamentarios para instarlos a apoyar la iniciativa?
-Sin duda, porque aquí lo estamos hablando es de la calidad de la democracia. Entonces un gran lastre que todavía arrastra a la derecha es que heredera las trabas de la dictadura de Pinochet y no creo que sean nunca alternativa de gobierno si es que no son capaces de desprenderse de esas ataduras malditas como este sistema electoral que le ha permitido empatar a mayoría siendo siempre minoría.



Conflicto con Perú y política exterior de Chile



-A raíz del conflicto con Perú, la Presidenta de la República tuvo que asegurar una vez más que Chile es un país estable, transparente y con una economía sólida. ¿Cómo evalúa la postura del gobierno debido a la marcha de adherentes de Ollanta Humala hasta el hito 1?
-Efectivamente la Presidenta de la República ha dicho cosas que son reconocidas a nivel internacional. Yo creo que el capital político y de imagen de Chile no está en riesgo, por el contrario, ya que nosotros hemos dado la muestra al mundo de construir un país en democracia que al mismo tiempo avanza en los temas de la justicia social, y los análisis que haga la prensa extranjera no afectan la buena imagen que tiene nuestro país.



-¿Qué responsabilidad le cabe la canciller Alejandro Foxley en esta materia?
-Yo creo que la política exterior de Chile está siendo conducida de manera notable. Tenemos a un canciller que tiene muy claro cuáles son las responsabilidades, las tareas y los intereses de Chile, y contamos con la Presidenta que tiene un capital mundial significativo y a mí me asombra escuchar recurrentemente a parlamentarios que critican la política exterior pero que nunca plantean caminos concretos.



-Pero este no es el primer roce que se tiene con Perú durante este gobierno
-Si alguien espera que la política exterior sea de color de rosa no entiende que este mundo está lleno de pequeños, medianos y a veces de grandes conflictos, ya que las naciones no solamente se mueven en base a valores y principios sino que también a través de sus propios intereses.



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