A pocas semanas de cumplirse los primeros seis meses de gobierno, el próximo 11 de septiembre, se diría que el gobierno se siente plenamente »instalado», tras meses considerados- por moros y cristianos- como »difíciles», por decir lo menos. Las palabras del Secretario General de Gobierno y vocero del mismo dejan entrever »nuevas etapas» o »nuevos diseños», a partir de entonces.
Relajado. Así se ve siempre al ministro Secretario General de Gobierno, Ricardo Lagos Weber, entre los pasillos de La Moneda. Parece un "niño desordenado" en medio de la solemnidad de la Casa de Gobierno, con una espontaneidad que a veces desubica a más de alguno, acostumbrado al formalismo de estas lides.
Se ve poco formal, es cierto, pero lleva al dedillo todo lo que está ocurriendo en las ocho manzanas e incluso bastante más allá. Muy compenetrado en la idea de "adelantar los conflictos", apenas escucha un ruido externo, se pregunta qué ocurre, imaginándose (en medio de risas) algún acontecimiento grave casi surrealista.
Ya en serio se explaya sobre cambios al binominal, Presupuesto 2007, los conflictos sociales que vienen y se anticipa a los especulaciones que rondan en los «círculos informados» sobre un eventual futuro cambio en subsecretarias e intendencias.
A pocas semanas de cumplirse los primeros seis meses de gobierno, el proximo 11 de septiembre, se diría que el gobierno se siente plenamente "instalado", tras meses considerados- por moros y cristianos- como "difíciles", por decir lo menos.
Sus palabras, aunque cautelosas, dejan entrever, no obstante, "nuevas etapas" o "nuevos diseños", a partir de entonces.
– Ministro, ¿cómo ve el Gobierno las conversaciones con respecto al cambio del sistema electoral binominal que están llevando a cabo los partidos de la Concertación con los ex presidenciables de la Alianza?
– Lo primero que hay que decir es que el tema de la reforma al sistema electoral es algo muy sentido por la Concertación desde hace mucho tiempo. En la última elección presidencial fuimos testigos todos los chilenos de que todos los candidatos presidenciales estuvieron por modificar el sistema electoral, algunos con más ambición, otros con menos, y esto incluye a Sebastian Piñera y Joaquin Lavín.
– Pero el discurso de una parte relevante de la oposición es que èste es un tema que no le importa a la gente y eso se escucha muchas veces en la calle…
– He leído declaraciones, efectivamente, sobre que este un tema que no les importa a los chilenos y chilenas. Se ha señalado que estos son temas políticos, cuando lo que la gente está preocupada por otros temas. Este tipo de afirmaciones es faltarle el respeto a los chilenos y chilenas. A ellos sí les importa el tema político, porque, por ejemplo, han votado activamente en todas las elecciones desde 1988 a la fecha. Se levantan temprano a votar por un concejal, por un alcalde, por un diputado, un senador o un Presidente de la Republica. La gente entiende lo que es la política en Chile y sí le importa, porque de lo contrario no habrían ido a votar al plebiscito, ni a todas las elecciones sucesivas, en la forma tan activa que se hace. No es correcto ni adecuado y es mirar por arriba del hombro, a los chilenos y chilenas, cuando se les dice: mire, este tema no les interesa a ustedes, a ustedes les tiene que interesar la delincuencia, el empleo. Yo creo que a los chilenos les interesa esto último, obviamente, pero también los temas políticos. La gente entiende, además, que esas cosas- empleo, delincuencia, etc- se discuten frecuentemente en el Congreso y éste se elige a través del sistema electoral.
"Lavin y Piñera han honrado su palabra"
– ¿Porqué hay que hablar con Piñera y Lavin y no con los partidos que representan?
– Los partidos de la Concertación están buscando un diálogo permanente con quien quiera tenerlo en materia de reforma electoral. Hubo una muy buena reunión con Sebastián Piñera y una muy buena reunión con Joaquin Lavín, y entiendo que el 6 de septiembre se reúnen con la directiva de RN. Lo interesante es que los candidatos presidenciales de la derecha han honrado su palabra, en consecuencia ellos entienden que esto era la correcto que habia que hacer, sin prejuzgar el resultado. Ellos entienden que aquí hay espacio para una conversación que lleve eventualmente a una modificación del sistema electoral actual. En el caso de Sebastián Piñera, él se reunió y ayudó- nótese la palabra, ayudó…-, a que al interior de RN se diera la oportunidad de sentarse a conversar con los secretarios generales y eso ojalá se materialice el día miércoles. Esa es una buena noticia, pero allí ayudó Sebastián Piñera. En el caso de Joaquin Lavín, yo creo que él ha sido honesto con él mismo y con lo que le dijo a los chilenos y chilenas en su oportunidad. Y yo creo que más que la UDI le haya quitado el piso a Lavín, tal vez, este último ha sido mejor que la UDI, en ese sentido, más consistente. Un candidato presidencial dos veces de la UDI…uno pensaría que debió haber sido apoyado…
– ¿Ustedes creen que la UDI va a terminar sumándose a este esfuerzo?
– Yo creo que si las conversaciones van bien encaminadas, ojalá, yo creo que todos van a terminar sumándose. Puedo entender que cuando se habla de modificar el sistema electoral haya temores de no salir para atrás, desde el punto de vista de cómo estoy yo… eso lo puedo entender, pero creo que va a primar una mirada de más altura…Soy por esencia optimista.
¿Gobierno «empatado»?
– Ya se publican algunos balances en la prensa de los primeros seis meses del gobierno y no son demasiado halagueños. Se dice que el gobierno a lo más va "empatado", pero que se quiere que "meta goles"…
– Bueno, yo creo que el Gobierno está trabajando para marcar los goles cuando estén las condiciones para marcar goles. Me explico: se están adoptando una serie de medidas que van a tener impacto: Chile Compite, las medidas sobre pymes anunciadas el lunes por la Presidenta, apoyo a las familias campesinas, los tratados de libre comercio que se han suscrito -con China, entre otros- y vamos a tener un Presupuesto expansivo, dentro de las normas que nos hemos dado de prudencia fiscal.
– A propósito ¿quedaron superadas las distintas visiones dentro de la Concertación, a su juicio, respecto del presupuesto?
– Esta discusión quedó bastante superada. El guarismo de crecimiento del gasto era todo en un minuto. Si acaso iba a ser de uno o dos dígitos. Ahora, es lo que dijo el Gobierno en su momento: concentrémonos en qué tareas vamos a utilizar los recursos y de qué forma los vamos a gastar. Va a ser de una forma muy eficiente y va a ser un presupuesto expansivo, donde dos de cada tres pesos van a gasto social…
– Esa es la misma proporción de todos los últimos presupuestos…
-Sí, pero lo relevante es que ahora la torta es más grande… Eso se dice poco…
– ¿La DC se alineó al final con esa idea, después de Cerro Castillo?. La comisión económica de la DC, en todo caso no habla solo de gasto social, sino de también y en forma bien importante, de gasto productivo, que siente las bases para el crecimiento futuro…
-Bueno… pero veamos primero el Presupuesto antes de prejuzgar el resultado. Yo he visto a la DC en los últimos días en bastante sintonía con el discurso del gobierno, me parece a mí. Y eso es una buena señal. Siempre es difícil compatitibilizar expectativas muy grandes como las que hay en Chile, de este Gobierno, con una percepción de riqueza, por temporal que sea ésta. Esa es una ecuación compleja a la que ha estado abocado el Gobierno, el ministro de Hacienda y la Presidenta. Los presidentes siempre quieren más… pero la Presidenta ha sido muy clara en el sentido de que eso se va a ser con responsabilidad y creo que no cabe duda que ha estado respaldando claramente, como debe ser por lo demás, al ministro de Hacienda. No nos hemos perdido nosotros en eso. El gobernar es saber tener el timón firme, es educar y explicar, porqué las cosas no pueden ser más, o porque otras cosas no se pueden hacer, derechamente…
– Se dice que el presupuesto va a ser de los más altos de los últimos años ¿Cuánto más alto?
– Sin entrar en los números, va a ser el presupuesto más alto de los últimos años, como lo dijo la Presidenta y el ministro de Hacienda, creo que solo comparable con el año 91 ó 90, tal vez, cuando hubo una reforma tributaria, donde llegaron recursos extras importantes y esos se volcaron, pero eso fue al comienzo de la transición, cuando había una deuda social pendiente muy grande, pero ya en pleno régimen democrático, va a ser un presupuesto muy grande y lo importante es tener la capacidad de utilizar esos recursos bien.
– En todo caso ¿hay una definición en las palabras de este jueves de la Presidenta en la Cena de la Minería, en orden a reforzar la responsabilidad fiscal?
– Ella usó una frase muy buena que resume muy bien el pensamiento del gobierno: No podemos tener pan para hoy y hambre para mañana. Por ejemplo, si decidimos usar todos los recursos que tenemos y decimos vamos a financiar determinado tratamiento de cierta patología… Si en dos años y medio más el precio del cobre baja, sustancialmente, a los niveles que tuvo el año 1996 y si más encima la economía internacional se desacelerara, ¿parece razonable decir: mire, ahora tenemos que quitar el tratamiento de esa patología? Eso no es responsable ni serio. Si lo es asegurar que las patologías cubiertas por el Auge, que han ido creciendo, van a poder mantenerse en el tiempo, por dar un ejemplo.
Mes de conflictos sociales
– Se resolvió el tema de Escondida, que aunque fuera privado preocupaba al Gobierno; en algo también se resolvieron los temas de salud, pero viene Codelco, la ANEF, y siguen los estudiantes…
– Usted mismo cita conflictos resueltos y no resueltos. Es un tema donde efectivamente ya hay señales mixtas, pero que hay que tomárselas en serio. Hemos estado en eso. Ello explica también lo de la Confusam, mucho trabajo, conversar, explicar…
– ¿Hay una voluntad expresa de desactivar o solucionar esto temas?
– Yo creo que cualquier gobierno medianamente responsable tiene que tener la voluntad, lo importante es si uno tiene al final la capacidad y tiene al frente un interlocutor con voluntad de escuchar también. Y allí hay que hacer todo el esfuerzo para plantear que hay cosas que se pueden hacer y otras que no se pueden hacer. Va a ser un mes de mucho trabajo…para ponerlo de alguna forma…
– ¿Lo dice por eso de septiembre «movido"?
-No sé porque le ponen septiembre, porque octubre también…en general, son meses de mucho trabajo, pero uno es optimista…
– ¿Es decir, ustedes están trabajando para que esa conflictividad de que se habla no sea especialmente compleja durante el próximo lapso de tiempo?
-Esperamos y vamos a trabajar para dar satisfacción, en la medida de las responsabilidad que tenemos como gobierno, a las legitimas demandas de muchos sectores. No podemos prever si eso se va a traducir en movilizaciones, que en todo caso anteriormente se han dado… bueno, este año podría ocurrir que fuera la excepción, pero por cierto, la probabilidad es baja.
Cambios de subsecretarios y "nueva etapa"
– Ministro, se ha hablado de cambios de subsecretarios y de intendentes, incluso especulando con ciertas fechas…
– Bueno, si en esas versiones estaba el cambio en la Subsecretaria de Carabineros, le apuntaron esas versiones…si era ese el cambio, le apuntó…(ríe)
– ¿Pero què hay con eso? Hubo un cambio de gabinete que se ha estimado que no tuvo el alcance requerido, según algunos, y según otros, ahora vienen cambios en materia de subsecretarios e intendentes…
– …hubo un cambio de gabinete y hubo personas que dijeron que no fue suficiente, mientras otras encontraron que no era necesario, y otros dijeron que se podía abarcar a otro tipo de funcionarios. Un cuarto tipo dice que lo consideran indiferente…
–Pero derechamente, ¿el tema de los subsecretarios esta en revisión? Hay algún tipo de análisis en particular de eso…
– (piensa unos segundos)…No, que yo esté enterado… Ahora, siempre es bueno reiterar, que estamos siempre todos siendo evaluados, ministros, subsecretarios, intendentes, etc. Y tengo la impresión de que la Presidenta ha demostrado que cuando ella llega al convencimiento de que hay que realizar algunos ajustes o cambios en el equipo para una nueva etapa que viene, para generar un cambio en algún tipo de diseño, quedó demostrado que no dudó en hacerlo, incluso a los 123 días de gobierno.
-¿Qué quiere decir eso?
– No estaba en los libros de nadie ese cambio de gabinete, yo creo, al principio del gobierno. No era ni fue planificado, pero finalmente la Presidenta llegó a esa convicción y lo llevó a cabo. Y eso es una buena señal, por lo menos yo me mantengo estimulado…
