Ex subsecretario del Interior del gobierno anterior y actual miembro del TC, Jorge Correa Sutil, reconoció fallas en la política de seguridad ciudadana de Ricardo Lagos, pero se defendió argumentando la falta de colaboración de las municipalidades. En tanto, Paz Ciudadana, que ayudó al gobierno a crear el plan Comuna Segura, de desmarcó del revés de este programa en la prevención del delito.
El ex subsecretario del Interior, Jorge Correa Sutil, aprovechó su participación en un encuentro realizado en la Universidad Diego Portales (UDP), para realizar un balance de la política de seguridad ciudadana implementada durante el gobierno de Ricardo Lagos, justo en momentos en que la administración actual ha planteado la necesidad de reformular el Plan Comuna Segura porque no ha cumplido satisfactoriamente con la misión de prevenir el delito.
En su intervención en el seminario "Política de inclusión social: experiencia inglesa y desafíos para nuestro país", el abogado y actual miembro del Tribunal Constitucional (TC), no habló de fracaso de la política, pero sí de "claroscuros" o "cosas poco logradas", planteando la necesidad de que el Estado continúe con su labor en forma urgente, especialmente si el país tiene el doble de presos proporcionalmente que Inglaterra, el triple de Francia y el doble de Argentina, lo que es una señal de que las cosas no están funcionando bien en esta materia.
Para el ex funcionario, la política del gobierno de Lagos "está allí para quedarse para siempre" porque tiene dos pilares fundamentales que no se pueden obviar en alguna reformulación: la intervención de barrios vulnerables y la equidad que ello implica en la distribución de los recursos.
"Lo que sucede dramáticamente (en estos barrios) es una falta de presencia del Estado y de los servicios públicos. El Estado ha ido desapareciendo y como las relaciones de dominación no desaparecen, el lugar de las prestaciones estatales lo fue tomando con mucha fuerza el narcotráfico", afirmó.
En esa línea recordó que hasta 1998 la población La Legua "era un lugar bastante seguro", con la única prevención, explicó, de que dicha seguridad dependía de las propias bandas de narcotraficantes.
La culpa de los municipios
Por ello sostuvo que es muy difícil pensar en brindar seguridad en los barrios vulnerables si no se cierra la brecha de la actividad estatal, aspecto en el que "registramos más fracasos que éxitos", expresó. Esto debido a que los organismos públicos funcionan con lógicas individuales, es decir, como verdaderos "silos", concepto utilizado por el experto inglés Roger King, que dictó la charla sobre seguridad ciudadana en Londres, que estructuró el debate en la UDP.
"La idea de (tener) estos silos, bajo un programa y recursos comunes, es un sueño todavía lejano y donde me parece que la rectificación en la dirección que el actual gobierno toma, es una dirección correcta. Me parece que prevenir sin un compromiso muy fuerte de educación, vivienda y de salud, es particularmente difícil", aseveró.
Pero su intervención no sólo fue una autocrítica, sino que también apuntó responsabilidades hacia los alcaldes, quienes de una u otra forma se apropian de los planes Comuna y Barrio Seguro, siendo que ellos están llamados a ser facilitadores y no a ser un obstáculo para llegar a la comunidad.
"Una de las cosas no logradas de este programa es sumar adecuadamente a los municipios a estos proyectos, la tensión del municipio queriendo manejar un proyecto que es local, estoy hablando desde mi experiencia en la subsecretaría del Interior. Esa es una tensión claramente no resuelta, porque la apuesta no es del empoderamiento municipal, es un problema de empoderamiento local, de líderes locales, no de líderes municipales", afirmó.
Paz Ciudadana se desmarca
A su turno, el gerente de la Fundación Paz Ciudadana, Gonzalo Vargas, que también asistió como uno de los expositores, se desmarcó del fracaso del programa Comuna Segura, que nació con la administración Lagos y que el organismo ayudó a preparar, en 2000, tomando como base la experiencia internacional en la materia.
Vargas aclaró que efectivamente se participó en el proceso de adaptar estrategias de otros países, las que finalmente dieron como resultado la creación de un consejo municipal de seguridad, con su respectivo secretario técnico y su asignación de fondos respectiva, elementos que independiente de cualquier reestructuración deben mantenerse a firme.
"La postura desde el comienzo de la fundación, fue que era necesario hacer planes piloto en un número muy acotados de comunas, validar el modelo de trabajo para después masificarlo. Lo que sucedió a corto andar, al año 2002, diría yo, es que la autoridad resolvió legítimamente, aunque nosotros discrepamos, masificar este programa y llevarlo a 70 comunas de país, sin evaluar si la modalidad de trabajo estaba o no generando los impactos que se estaban buscando y eso motivó que la fundación se retirara de la participación de ese programa", expresó el directivo.
Para el organismo, lo que ahora importa es modificar las metodologías con las que se han estado trabajando, ya que muchos de los proyectos, incluidos varios de tipo deportivo, no estaban apuntando efectivamente a la prevención del delito.
"Lo que sí se ha estado debatiendo mucho es acerca de la manera práctica cómo se han asignado los recursos. El tipo de proyectos que realmente se han ejecutado y si acaso eso ha producido resultado o no, y la verdad es que todas mediciones, todos los estudios que nosotros tenemos indican que el plan Comuna Segura no ha tenido un impacto en la reducción de la delincuencia, y por lo tanto hay que reformular la manera en cómo se trabaja a nivel local", dijo.
La opinión de la revista "Cañamo"
Entre el público que asistió al seminario se encontraba el Sebastián Binfa, director de la revista "Cañamo", publicación que promueve la legalización de la marihuana, quien dio a conocer su parecer sobre lo que falta para contar con un plan integral de seguridad ciudadana, que no estigmatice a los consumidores de drogas.
"Nosotros apostamos por la política de reducción de riesgo y daño, que es lo mismo que se hace en Inglaterra y en Europa, y que acá no se habla, porque si tomamos a los usuarios de drogas (dentro de políticas contra la delincuencia) estamos sumando un problema más; mientras que si los tomamos como no problemáticos y se les entrega información para reducir los riesgos y daños de su propio consumo, se elimina un problema. Creo que en el fondo se requieren tres herramientas, no son sólo dos prevención y rehabilitación, sino que prevención, rehabilitación y reducción de riesgo y daño", afirmó.
A su juicio, el fracaso de la política de seguridad ciudadana del gobierno está relacionada con que "la sociedad es poco participativa en Chile". "El señor King reflejaba algo que me parecía sensato, que es el tema de lo importante que tiene que ser la descentralización y que sea la propia comunidad la que tome riendas en esto, y no la comunidad involucrada solamente en organizaciones formales como las Juntas de Vecinos, sino que también los colectivos de jóvenes, que quizás no tienen muchas ideas convencionales pero tienen mucho que decir", señaló.
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