Senador y vicepresidente del PPD expresó que fueron »legítimos» los planteamientos del ex ministro de Justicia, quien acusó a la DC de presionar a la Presidenta Michelle Bachelet, para cambiar a ministros de todos los partidos. El parlamentario también cuestionó duramente la designación de la nueva titular de Medio Ambiente, la socialista Ana Lya Uriarte.
A la hora de hacer balances por los cambios en el gabinete que realizó la Presidenta de la República, el Partido Por la Democracia (PPD) se encuentra satisfecho. Así lo manifiesta el senador y vicepresidente de la colectividad, Guido Girardi, quien influyó en la designación de Marcelo Tokman en el Ministerio de Energía y de José Goñi en Defensa.
Según el parlamentario, la llegada de ambas autoridades pondrá un elemento adicional de importancia, ya que ambos tienen capacidades y son personas que conocen muy bien sus sectores. De paso, también apoya la nominación de José Antonio Viera-Gallo (PS) en la Segpres y de René Cortázar (DC) en Transportes, mas no así la de Ana Lya Uriarte (PS) en Medio Ambiente.
Enfatizó sus aprensiones respecto al rol que jugará la nueva ministra de Medio Ambiente, ya que a su parecer no tuvo una buena gestión cuando condujo la Comisión Nacional del Medio Ambiente (Conama), señalando que esperaba que esta vez no obedeciera a las exigencias de los empresarios por sobre la protección de la ciudadanía.
-¿Cómo evalúa los cambios que hizo la Presidenta para fortalecer su gobierno?
-Primero, me gustaría destacar que fue positivo mantener al ministro del Interior, Belisario Velasco, porque él ha hecho una buena gestión en momentos difíciles. Ahora, en el caso de la ex ministra Paulina Veloso, yo valoro mucho su trabajo y su forma de ser porque siempre fue honesta, transparente y eficiente. Pero la llegada de José Antonio Viera-Gallo es importante porque él tiene una gran capacidad de diálogo con la Concertación y la derecha y ayudará a fortalecer las relaciones con el mundo político.
-Algunos sectores más de izquierda de la Concertación manifiestan sus dudas respecto a la posibilidad de que Viera-Gallo sea más complaciente con la derecha. ¿Comparte eso?
-No creo que José Antonio ponga sus puntos de vista por sobre temas nacionales que haya puesto sobre la mesa la Concertación. El tiene que darle prioridad a las propuestas del oficialismo, porque son éstas las que representan a la mayoría del país.
Yo no creo que él tenga interés en jugar a hacer un partido propio y obedecerle a la derecha, porque de partida no le iría bien. Entonces, creo que él tiene grandes capacidades y destrezas para llevar adelante un proyecto país.
Y en ese sentido hay que reponer el debate de ideas al interior de la Concertación y poner en el tapete temas importantes para la comunidad, por ejemplo, cómo mejorar el Auge, reformar el sistema educacional, hacer los cambios al sistema de pensiones y fijar más normas a las Isapres. Hay varias materias y creo que José Antonio, más que tener una agenda propia, no tengo ninguna duda que le dará prioridad a las propuestas de la Concertación y del gobierno.
-¿Qué postura espera de la derecha en esta nueva etapa?
– Creo que la derecha no tiene mejores ideas de la Concertación y, por lo mismo, lo único que le queda es la crítica…
También me gustaría destacar la llegada de René Cortázar al Ministerio de Transportes porque es una persona con una gran capacidad y quizás pueda transformar de aquí a un año un sistema de transporte público en un modelo para el mundo. Pero me gustaría señalar que yo castigaría muy duro al gerente de Sonda (responsable tecnológico del Administrador Financiero del Transantiago), Andrés Navarro, por haber engañado al país y ojalá que el ministro no lo trate con guantes blancos, considerando que es muy amigo de esta persona…
-¿Entonces espera que el ministro Cortázar deje de lado su amistad con Navarro a la hora de aplicar sanciones?
-Yo creo que Sonda le ha hecho un flaco favor al país, le ha mentido a todos los chilenos y es uno de los principales responsables de los problemas presentados por el Transantiago.
PPD y sus nuevos ministros
-¿El PPD está satisfecho con la llegada de los nuevos ministros de ese partido: Marcelo Tokman (Energía) y José Goñi (Defensa)?
-Yo creo que Marcelo es una verdadera luz para el Ministerio de Energía porque es una persona muy innovadora, sencilla y capaz, entonces será un aporte relevante para dicho ministerio que abarca un tema relevante para nuestro país. También no puedo dejar de referirme al nuevo ministro de Defensa, que es una persona muy capaz, con gran experiencia en la diplomacia y estoy seguro que mantendrá una excelente relación con las Fuerzas Armadas.
-El PPD se siente conforme con sus nuevos ministros, pero ¿qué le parece que al interior de la Concertación se hayan producido conflictos entre la DC y el ex ministro Isidro Solís, por ejemplo?
-Nosotros estamos satisfecho. Bueno, respecto al conflicto con Isidro, yo personalmente tengo una muy buena opinión de él y no seré quien para criticarlo. Es legítimo que alguien pueda plantear sus puntos de vista cuando sale de un gabinete y no lo veo problemático lo que pasó.
Y con respecto a la designación de Ana Lya Uriarte en el Ministerio de Medio Ambiente, tengo mis reparos porque creo que ella cuando fue directora de la Conama hizo desaparecer a esta institución y no es una señal potente para el mundo medio ambiental. Si bien es cierto voy a colaborar en su gestión, estaré atento a lo que haga porque no veo a Ana Lya que haga algo distinto en esta cartera, ya que cuando estuvo en el otro cargo no tuvo un buen desempeño.
-¿Fue una designación errada para mantener los equilibrios políticos en los ministerios y dejar contento al Partido Socialista ?
-No lo sé. Quizás a veces no hay muchas alternativas y primó, a lo mejor, el tema del género. Pero más que llorar sobre la leche derramada hay que tomar el toro por las astas y no creo que en el cargo de ministro pueda avanzar mucho porque no hizo nada en la Conama y ella no puede ser sólo la candidata de los empresarios, pero bueno si contó con el respaldo de la Presidenta tenemos que darle una oportunidad para que haga una gestión distinta.
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