»Cuando tanto se habla de perfeccionar la función diplomática de Chile, creo que la estabilidad económica de sus funcionarios debe estar precisamente entre los aspectos principales de dicha mejora pues, en caso contrario se corre el riesgo de contar con personal carente de incentivo para desempeñar sus funciones adecuadamente», advirtió el embajador chileno en Italia.
La compleja situación que afecta a los diplomáticos que se encuentran en las embajadas europeas, no sólo ha sido comunicada por los embajadores de carrera al Ministerio de Relaciones Exteriores, sino que también por los designados por política como lo es nuestro actual representante en Italia, Gabriel Valdés Subercaseaux.
El ex senador DC, en una minuta que envió en abril pasado al subsecretario de Relaciones Exteriores, Alberto Van Klaveren, da cuenta que la devaluación constante del dólar en Europa. Y si bien considera «innecesario ahondar en las causas», acota que esta situación "es irreversible que afecta seriamente los ingresos de los funcionarios del Servicio Exterior y agregados que desempeñan funciones en el continente europeo".
Para Valdés, el funcionamiento de las embajadas ni los funcionarios se han visto afectados por la depreciación de la divisa estadounidense. "Resulta poco comprensible que mientras el funcionamiento de nuestras embajadas no se ve afectado por esta situación, gracias al envío mensual de recursos suplementarios, tampoco lo son los funcionarios contratados localmente, al gozar de sus remuneraciones en euros".
Sin embargo, su molestia radica en «una grave violación del principio de igualdad ante la ley, planteamiento que ya he puesto en conocimiento de las autoridades del Ministerio, (que) debe ser corregida, pues no es dable sostener que quienes realizan la alta función de representar a nuestro país en el extranjero vea disminuida, mes a mes, su capacidad de hacer frente a las obligaciones económicas rutinarias derivadas de su permanencia en los países europeos".
Puntualiza el diplomático que "cuando tanto se habla de perfeccionar la función diplomática de Chile, creo que la estabilidad económica de sus funcionarios debe estar precisamente entre los aspectos principales de dicha mejora pues, en caso contrario, se corre el riesgo de contar con personal carente de incentivo para desempeñar sus funciones adecuadamente".
Costo de vida
El ex presidente del Senado recuerda que el último reajuste del costo de vida fue hecho en julio del 2004, "estimando que el euro tendría un costo de 1,20 dólares norteamericanos, hecho que tampoco se ajustó a la realidad de esa época".
Hace hincapié el embajador de Chile en Roma que "en el período transcurrido desde dicho reajuste hasta la fecha se ha producido una depreciación del dólar del 14%. A esto habría que agregar la variación del IPC para Italia para el mismo período de 6,7%, mientras para el resto de la Unión Europea fue de 6,5%, lo que totaliza una pérdida neta de poder adquisitivo de un 20,5% para el mismo período".
La nota el embajador se la envió además al Director General Administrativo, Pablo Piñera y a los jefes de Contabilidad, Rebeca Avilés y de Recursos Humanos, Patricio Victoriano. Lo mismo hizo con las embajadas de Chile ante la Unión Europea, embajada de Chile ante la Santa Sede, la representación de nuestro país ante los organismos internacionales, con sede en Ginebra, y ante la UNESCO.
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Diplomáticos califican de »seria» situación de embajadas en Europa
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