A diferencia de lo que había sostenido hasta la semana pasada, en el sentido de que era la ley de partidos políticos la que impedía las órdenes de partidos a sus legisladores, el senador por Aisén ahora recordó que incluso la Constitución resguarda la inviolabilidad de las opiniones y votos de los parlamentarios.
El senador Adolfo Zaldívar (DC) advirtió este martes que una posible sanción en su contra por parte del Tribunal Supremo (TS) de la Democracia Cristiana (DC) representaría una "transgresión a la institucionalidad», al tiempo que volvió a defender su decisión de votar en contra del proyecto sobre los recursos para el Transantiago.
A través de una declaración pública, el legislador reaccionó a la decisión de la instancia disciplinaria de acoger a trámite el escrito presentado por la mesa directiva en su contra, en la que lo acusa de una "grave" falta por no haber respetado el acuerdo del Consejo Nacional sobre la iniciativa gubernamental.
A diferencia de lo que había sostenido hasta la semana pasada, en el sentido de que la ley de partidos políticos impide las órdenes de partidos a sus legisladores, el representante por Aisén ahora recordó que incluso la Constitución resguarda la inviolabilidad de las opiniones y votos de los parlamentarios.
En su declaración, Zaldívar enfatiza que «mi conciencia, la búsqueda del bien común y los derechos humanos de millones de compatriotas que han sido violentados en su vida diaria, degradados, humillados y vejados con el peor experimento social de la historia, avalan plenamente mi decisión de votar negativamente un mal proyecto para un peor plan de transporte público».
En ese sentido, recordó que el artículo 5 de la Constitución establece que los órganos del Estado deben promover la defensa y ejercicio de esos derechos, y que el artículo 61 «es taxativa en la inviolabilidad de los diputados y senadores respecto de sus opiniones y votaciones, siendo estos principios universalmente respetados en toda democracia representativa».
«La delegación de soberanía que hicieron en mi persona, quienes me votaron, es un pilar básico que no puede ser violado sin atentar contra la democracia", afirmó el legislador.
En ese sentido, indicó que «se me hace un deber ineludible informar a mis camaradas del Tribunal de Disciplina que tengo la obligación de hacer la salvedad que el hecho de presentarme ante ellos, por deferencia y respeto a nuestras instituciones, no me hace parte de una trasgresión a la institucionalidad vigente; la que está en pleno desarrollo y que se materializaría al momento de sancionarme de acuerdo a lo invocado por integrantes de nuestra Directiva Nacional».
Asimismo, el legislador afirmó que «el sufrimiento diario de los santiaguinos, agravado por el crudo invierno, y la falta de respeto a las regiones al ofrecer ahora recursos que siempre les negaron, para tapar la irresponsabilidad de quienes diseñaron e implementaron este verdadero crimen social, hace que esta insensatez de pretender sancionarme por defender a la gente me resulte menos agraviante».
«Son ellos quienes están contra el sentido común, contra la legalidad vigente y contra los principios y valores esenciales para todo demócrata, más aún para nosotros en la Democracia Cristiana", finalizó.
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