Fuentes cercanas al Ministerio de Defensa señalaron que no es aconsejable que miembros en servicio activo de las Fuerzas Armadas participen en la creación de entidades »privadas» vinculadas al quehacer institucional. Estiman que puede llevar a una confusión de roles que involucre la responsabilidad de las instituciones de la defensa nacional.
Preocupación y extrañeza han planteado fuentes cercanas al Ministerio de Defensa porque en la página web de la Armada de Chile aparezcan enlaces (links) a sitios de fundaciones privadas en cuyos directorios participan altos oficiales de la institución. Algo que a la entidad naval le parece normal, pese a no estar claro si jurídicamente ello está permitido.
Tal inquietud se explica porque, a juicio de las mismas fuentes, no es aconsejable que miembros en servicio activo de las Fuerzas Armadas participen en la creación de entidades "privadas" vinculadas al quehacer institucional. Se estima que ello puede llevar a una confusión de roles que involucren la responsabilidad de las instituciones de la defensa nacional, debido a que no existe un reglamento jurídico sobre la materia, ni menos un catastro de este tipo de organizaciones ni de sus actividades y formas de financiamiento.
Una de las fundaciones es Mar de Chile, entidad privada sin fines de lucro, cuyo objetivo es fomentar la «conciencia nacional en cuanto a la importancia de los territorios marítimos, lacustres y fluviales».
En su directorio participan el vicealmirante Francisco Martínez, actual jefe de la Dirección General del Territorio Marítimo (Directemar), entidad que tiene a su cargo importantes funciones regulatorias en materia marítima; además del contralmirante Carlos de la Maza, secretario general de la Armada y el comodoro Enrique Larrañaga, director de Educación de la entidad naval. Todos estos oficiales comparten directorio con importantes figuras empresariales en dicha institución, como Ricardo Claro y Bernardo Matte.
Otra es la fundación Carlos Condell, también entidad sin fines de lucro, cuyo presidente es el comodoro Larrañaga, y que cuenta con la participación de varios oficiales en representación del comandante en jefe de la Armada y de Directemar, entre otros. En la página web se señala que dicha institución "fue creada en 1984 por la capacidad visionaria del entonces comandante en jefe de la Armada, almirante señor José Toribio Merino Castro….".
Una tercera entidad es la fundación Blanca Estela que agrupa a mujeres de oficiales en servicio activo y en retiro de la Armada. Está a cargo de la esposa del comandante en Jefe de la Armada, Gloria Macchiavello, quien «junto a las voluntarias, con constancia, esfuerzo y mucha voluntad van en ayuda de aquellos integrantes de la Familia Naval que atraviesan por momentos difíciles», señala el sitio de la entidad.
Versión de la Armada
Consultada la institución naval por esta situación, indicó que «las fundaciones mencionadas no sólo se identifican en sus objetivos con la Armada, sino que existen vínculos en virtud del concepto de Responsabilidad Social que hoy en día quiere impulsar y hacer explícito el Ministerio de Defensa».
Por ello, puntualizaron que «es perfectamente comprensible entonces que exista un link con esas instituciones, como con muchas otras en nuestra página», y agregaron que "mucha gente relaciona en forma natural a la Marina con esas y otras organizaciones del ámbito marítimo y naval. En el fondo, estamos facilitando a nuestros compatriotas el acceso a información de interés, de bien común».
Puntualizaron que «las tres fundaciones persiguen fines muy nobles y altruistas, no tienen fines de lucro, sino sólo el interés de aportar a nuestro país y nuestra comunidad», y que quienes participan en ellas no reciben ninguna remuneración.
Sobre la participación del comodoro Larrañaga como presidente del Consejo Directivo de la Fundación Carlos Condell, y que «ello se entiende por la naturaleza educacional de la Fundación y por los vínculos existentes con universidades, institutos profesionales y de formación técnica, entre otros». Explican que la labor del consejo es dar los grandes lineamientos sobre la administración y desarrollo de la entidad, y que la instancia sesiona una vez al mes, fuera del horario de administrativo.
En cuanto a la mención que se hace al almirante Merino en el sitio web, sostienen que «tiene un carácter histórico, ya que fue él quien impulsó su fundación en 1984, en su calidad de comandante en Jefe de la Armada y dada la misión permanente de la institución en cuanto a promover los intereses marítimos. Nada más que un simple reconocimiento por este hecho. Es justo que las instituciones recuerden a sus fundadores. No tiene sentido buscar más «derivadas» de esto».
Sobre la fundación Mar de Chile, subrayan que hay tres oficiales activos, y "se encuentran allí por la comunidad de objetivos ya mencionada y por las orientaciones que del directorio se desprenden para un mejor cumplimiento de esos objetivos en relación con los temas marítimos".
Ese directorio, aclaran en la Armada, "está conformado por diversas personas que tienen relación con la misión y objetivos de la fundación, como Ricardo Claro y otros, por la contribución que pueden hacer dada su experiencia conocimiento y voluntad en contribuir al desarrollo de la conciencia marítima nacional».
