Hincapié de los alegatos ante la Quinta Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago estará puesto en los procesamientos que el organismo estatal había solicitado al ministro de fuero en diciembre de 2005. En cuanto al resto, defenderá la decisión del magistrado, pero sobre la base de los tecnicismos jurídicos tradicionales.
Finalmente, el Consejo de Defensa del Estado (CDE) resolvió la actitud procesal que adoptará con los 23 encausamientos dictados el jueves por el ministro Carlos Cerda, por el delito de malversación de caudales públicos en el caso Riggs, por un total de 20 millones de dólares.
Fuentes de la entidad explicaron a El Mostrador.cl que el organismo defenderá todos los dictamenes ante la Corte de Apelaciones de Santiago, cuando se analicen los recursos de amparo presentados por la familia Pinochet y los ex colabores del régimen.
Sin embargo, pese a que el CDE no tiene la convicción jurídica de que todos los imputados tienen una participación criminal, como lo sostuvo Cerda en su resolución, se utilizarán distintos «énfasis» durante los alegatos.
En otras palabras, el hincapié estará puesto en los procesamientos que el organismo solicitó a Cerda en diciembre de 2005: Joge Ballerino, Ramón Castro Ivanovic, Patricio Madariaga, Augusto Pinochet Hiriart y María Victoria Molina (aunque esta última no ha sido encausada).
En cuanto al resto, dijo la fuente, se operará sobre la base del alegato técnico.
La decisión se produce luego de una falta de definición del CDE frente al sorpresivo dictamen de Cerda, quien no esperó la reunión que el propio organismo le había pedido para llevar adelante una «estrategia inteligente» y retomar el Riggs para lograr objetivos a largo plazo.
El énfasis del que hablan las fuentes del CDE se entiende de la siguiente manera: frente a los imputados respecto de los cuales la entidad maneja pruebas concretas para justificar el procesamiento, en los alegatos ante la Quinta Sala, y luego en la Suprema, proveerá material para que sean confirmados. Del resto, defenderá la decisión de Cerda, pero sobre la base de los tecnicismos jurídicos tradicionales.
Por esta razón, la semana que se inicia será clave para el caso. Los recursos de amparo serán analizados por los ministros Dobra Lusic, Joaquín Billard y Juan Eduardo Fuentes.
La decisión puede ser a favor o en contra de los 23 dictamenes en su conjunto, o bien podría darse una selección de éstos. El mismo ejercicio es aplicado cuando los cargos sean vistos ante el máximo tribunal.
Dependiendo de cuántos procesamientos sean revocados, se podrá medir cuál fue el nivel de impacto de la decisión que tomó Cerda.
De todos modos, ya podría decirse que la Quinta Sala no apoyó una de sus primeras medidas. Se trata de la orden de detención que dictó en contra del ex albacea de Pinochet, el abogado Óscar Aitken.
Este último recurrió de amparo y al mismo tiempo solicitó la libertad, sin haberse notificado de la resolución ni presentado al tribunal, argumentando que como ya está procesado su detención no se justificaba. Sin duda, fue un punto a favor de su patrocinante Rodrigo Henríquez.
Aunque desde otra perspectiva, también podría decirse que la victoria judicial que tuvo el grupo de defensores fue por "secretaría", ya que ninguno de los querellantes se opuso al otorgamiento del beneficio.
Y mientras el ministro Cerda recibe un premio en dinero y simbólico en Estados Unidos por su lucha en materia de derechos humanos, los abogados chilenos, de un lado u otro del estrado, deberán trabajar toda máquina para que el caso Riggs, que se tramita desde 2004, no pierda la fuerza que debe tener.
