Oficina de la diputada Alejandra Sepúlveda fue el punto de reunión entre el timonel del Partido de los Regionalistas Independientes y el senador por Aisén. En la ocasión, Juan Carlos Moraga le ofreció el respaldo de su partido a los legisladores que acaban de abandonar la DC e, incluso, para una posible jugada carrera a La Moneda del líder colorín.
La renuncia de los cinco diputados colorines a la Democracia Cristiana (DC) ha aumentado el interés del Partido Regionalista Independiente (PRI) por generar un tercer referente que atraiga al mundo independiente. Tanto es así que en la reunión sostenida el miércoles entre el senador Adolfo Zaldívar y el presidente del PRI, Juan Carlos Moraga, éste le ofreció al parlamentario todo el apoyo de su colectividad en una eventual arremetida presidencial.
Pasado el mediodía del miércoles la oficina de la diputada Alejandra Sepúlveda, en el séptimo piso del Congreso, fue el lugar de encuentro entre Zaldívar y Moraga, cita en la que también participaron los colorines recién renunciados a la DC. Durante la larga conversación, Moraga reiteró su ofrecimiento de que el PRI sirva de plataforma para futuras elecciones municipales y parlamentarias de los seguidores de Zaldívar, respetando sus posiciones.
Ello porque en el PRI hace mucho que están pensando en crear un bloque que albergue tanto a desencantados de la Concertación como de la Alianza, aunque bajo el principio de perseverar en tres aspectos que consideran esenciales: La modificación al binominal, la corrección del modelo y una mayor participación de las regiones y comunas en la elección de los candidatos a los cargos públicos.
En todo caso, Zaldívar y su equipo estarían en proceso de evaluación de la oferta realizada por el PRI, donde existe optimismo en torno a la definición del colorin.
De hecho, en la tienda dirigida por Moraga ya se plantean el tema de que Adolfo se decida a levantar una candidatura presidencial y de ser así -dicen- «cuenta con todo nuestro apoyo, puesto que según los dirigentes del PRI existe total concordancia entre las posturas políticas de la colectividad y el pensamiento colorin.
No obstante, para concretar tan altas aspiraciones, en el PRI tienen la convicción de que será necesario comenzar por «ponerse de acuerdo en un proyecto de país para levantar el tercer referente», que a su juicio debe ser «amplio», de tal manera de convertirse en el bloque del 60% de chilenos que dice no sentirse identificado ni con la Alianza ni con la Concertación.
La idea que manejan para el tercer referente es la de un «gran movimiento nacional y popular» construido en base a «un esfuerzo de varios», aludiendo a que esto se podría generar con la suma de las fuerzas de independientes, el PRI, los colorines, ChilePrimero e incluso ex militares que ya están integrando el Partido Regionalista.
Los acercamientos con los colorines se vienen realizando desde junio de 2007, cuentan fuentes del PRI, por lo que ya estarían más o menos claros los puntos de convergencia. En el PRI reconocen que si bien tienen legalizado el partido en casi todo Chile, lo que les falta son figuras reconocidas, elemento que claramente aportaría el grupo de Zaldívar, en caso de llegar a un acuerdo que les beneficiara políticamente.
Quieren reclutar a De La Maza
Demás está decir que, de concretarse una unión, el sector escindido de la DC podrían llevar candidatos a las próximas elecciones municipales bajo el alero del PRI, por lo que este partido está siguiendo paso a paso la coordinación de los colorines en todo el país.
Tanto es así, que el PRI está esperando que el alcalde de Las Condes, Francisco de la Maza, tome una decisión definitiva en cuanto a si irá a la reelección respaldado por su partido, la UDI, o si lo hará como independiente. De optar por lo último, el PRI está dispuesto a facilitar toda su maquinaria para que pueda reelegirse.
El plazo que se han puesto para esperar a De La Maza es marzo, cuando en el gremialismo se tomará la decisión de apoyar al actual alcalde o reemplazarlo por otra figura.
