La decisión fue recibida con satisfacción por la AFDD, que consideraba que la institución no velaba por evitar futuras violaciones a los DDHH, posición que compartieron también los diputados de la bancada DC. Una opinión disitinta expresó el senador del PS Jaime Naranjo, para quien la noticia demuestra una nueva »vacilación» del Ejecutivo. [Actualizada]
El Gobierno resolvió retirar de su tramitación el proyecto de ley que crea el Instituto Nacional de Derechos Humanos.
La decisión se la comunicó el ministro secretario general de Gobierno, Francisco Vidal, a la presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD), Lorena Pizarro, tras recibirla en el Palacio de La Moneda.
La dirigente se mostró satisfecha con la decisión, considerando que «sentíamos que era una instancia que no velaba por la prevención y sanción a futuras violaciones a los Derechos Humanos y a vivir nuevamente el terrorismo de Estado».
En tanto, el jefe de la bancada de diputados del PDC, Eduardo Saffirio, consideró que se trata de «una decisión prudente y que permitirá avanzar realmente y en forma más integral en la defensa de los Derechos Humanos en Chile".
El parlamentario dijo que tras una reunión con Lorena Pizarro, quien entregó sus argumentos a los legisladores de la falange, «la gran mayoría de la bancada acogió las inquietudes y optamos por manifestar a la mesa de nuestro partido la preocupación por este proyecto, siendo partidarios de revisarlo y de buscar los cambios que se requieran para poder instalar definitivamente políticas de Estado verdaderas frente al tema».
Respecto a la posibilidad de crear una nueva iniciativa, Saffirio señaló que «este tema debe conversarse con el Gobierno, las agrupaciones y los parlamentarios, integrando las demandas pendientes».
Naranjo: es una mala noticia
La decisión, sin embargo, no fuebien recibida por el senador del PS Jaime Naranjo, quien manifestó que esto demuestra que «estamos nuevamente ante las continúas vacilaciones que el gobierno ha manifestado en diversas situaciones".
Agregó que "si bien es cierto es comprensible que las agrupaciones de derechos humanos hayan manifestado su rechazo a este proyecto, ya que no los satisfacía totalmente, existían otras organizaciones como el FASIC y el CODEPU que llamaron a aprobarlo ya que significaba un gran avance. Instituciones que nadie puede acusar de no buscar la verdad y la justicia".
«Considero que es una muy mala noticia, para la promoción y defensa de los Derechos Humanos en nuestro país y muy especialmente para los miles de ex -presos políticos y familiares de detenidos desaparecidos y ejecutados políticos que por diversos motivos no habían entregado sus testimonios ante la Comisión Rettig y la comisión de Prisión Política y Tortura y que ahora podrían hacerlo y acceder a una justa reparación», agregó.
La medida, enfatizó el parlamentario, «implica una desautorización para quienes en estrecho contacto con el gobierno formamos parte de la Comisión Mixta que por un largo tiempo trabajó para llegar a los consensos que permitieran la aprobación del Instituto Nacional de Derechos Humanos».
«La verdad es que con este tipo de vacilaciones y retrocesos se rompen las confianzas que deben existir entre los parlamentarios que formamos parte de la concertación y nuestro propio gobierno para poder realizar un trabajo serio y responsable», concluyó.
