Aunque el ministro René Cortázar sigue intentando atraer los votos de los independientes, la resolución del Tribunal Constitucional lo está dejando sin espacio para maniobrar. En el actual esquema, todo indica que pese a sus esfuerzos, el Ejecutivo no está logrando convencer a los únicos senadores que podrían dar vuelta la votación y evitar un fracaso mayúsculo.
El trascendido acerca de que el Tribunal Constitucional habría declarado inconstitucional el préstamo del BID que le permitió al Gobierno mantener el Transantiago, lo colocó en el peor de los mundos. Por lo pronto, parte del comité independiente se bajó de la reunión programada para ayer con el ministro de Transportes René Cortazar, pues estiman que el fallo del TC y el ultimátum del ministro a los operadores cambia totalmente el escenario que había hasta ahora. Si bien el secretario de Estado llegó a la cita, sólo se reunió con el senador Carlos Bianchi, quien tampoco dio garantías de que respaldará la iniciativa del Ejecutivo en el Senado.
Aunque Cortázar se negó a comentar los términos de la reunión, tal como están las cosas, el voto del jefe del comité independiente es con el único que eventualmente podría contar el gobierno. Eso, tal como señaló el parlamentario, si se dan algunos elementos que considera imprescindibles.
Ello porque uno de los aspectos que se abordó en la cita fue el fallo del TC y "si estos transcendidos son ciertos, sin duda alguna que lo primero que hay que escuchar del gobierno es la manera en que le va a explicar al país cómo va a hacer devolución de estos 400 millones de dólares", y, paralelamente, "cuál es la solución que propone para poder continuar con la discusión, en las comisiones especializadas, con respecto al mejoramiento del transporte de Santiago y del resto de las regiones", explicó Bianchi.
En opinión del senador el peor escenario que se podría generar en los próximos días es que el gobierno no acepte ninguna indicación del Senado, lo que a su juicio impediría cualquier acuerdo que le diera viabilidad al proyecto del Ejecutivo.
Los otros independientes
Mientras tanto, en el entorno del senador Carlos Cantero aseguran que él y Fernando Flores se bajaron de la reunión debido a que aspiran a "avanzar hacia un acuerdo más amplio" y que estarían trabajando en ello en coordinación con la Alianza.
Un factor importante para que tomaran esta determinación fue, primero, el ultimátum que le dio el ministro Cortázar a los operadores. Ello, porque -según explican en el entorno de los senadores- el secretario de Estado está exigiendo el cumplimiento de una serie de medidas que, meses antes, aseguraba estaban mejorando. Como la falta de buses en las calles y la regularidad de los recorridos de los mismos, entre otras. Por otra parte, está el fallo del TC que le habría restado credibilidad a las autoridades.
Al ya complicado escenario para La Moneda se suma el hecho de que todo indica que la derecha le está ganando en el lobby para atraer hacia su postura a algunos independientes. Un aspecto relevante en tal sentido es que Sebastián Piñera haya conversado telefónicamente con Cantero, antes de que éste optara por restarse de la cita con Cortázar, misma que fue postergada para el miércoles en el Congreso, en Valparaíso.
Todo, aunque Bianchi aseguró que a la reunión con Cortázar no llegaron Cantero y Flores porque tenían otros compromisos y que él no podría asistir al almuerzo del miércoles por la misma razón. Pero que no existen diferencias al interior del comité respecto a cómo abordar el tema con el gobierno.
Así, todo indica que los esfuerzos del gobierno para mantener la más grande de las políticas públicas implementadas en Chile, podrían irse por la borda en el Senado. Pese a que el ministro de Transportes aseguró anoche que le explicó a Bianchi la "importancia" y "beneficios" del polémico proyecto para los chilenos.
En la misma línea, señaló que la idea de la reunión es que hay que trabajar en una actitud de "colaboración entre los poderes del Estado para ir ofreciendo un mejor servicio a las personas, en todo el país". Aunque aclaró que la tramitación de la iniciativa seguirá el calendario que fue acordado en la comisión de Transportes de la Cámara Alta. Es decir, no se le quitará la urgencia.
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