A su juicio, este recurso está destinado para una calamidad pública que afecte a todo el país, pero el problema del Transantiago sólo perjudica a los habitantes de Santiago.
El diputado UDI Marcelo Forni instó al Gobierno a revisar la constitucionalidad del dos por ciento, ya que a su juicio no se cumple con el requisito establecido en el artículo 32 inciso 20 de la Constitución.
Forni explicó que este artículo señala que el Presidente de la República, con la firma de todos los ministros de Estado, podrá decretar pagos no autorizados por ley, para atender necesidades impostergables como son las calamidades públicas, la agresión exterior, la conmoción interna, el grave daño o peligro para la seguridad nacional o el agotamiento de los recursos destinados a mantener servicios que no puedan paralizarse sin serio perjuicio para el país.
A su modo de ver el articulado, la decisión del uso del dos por ciento no corresponde, ya que el problema que se vive con el Transantiago sólo afecta a los habitantes de Santiago y no a todo el país.
Aseguró que en este caso, no se está frente a una calamidad pública sino que afrontando una verdadera "calamidad política" por parte del Ejecutivo, y que por ello estudiará si es procedente o no el uso de este dos por ciento.
«Creo que es muy importante que se analice, debidamente, la constitucionalidad del uso de este dos por ciento, porque no estamos frente a una calamidad pública, estamos en presencia de un desastre político, que no es lo mismo. La Constitución no establece el uso del dos por ciento para desastres políticos, sólo lo establece para calamidades públicas, y en este caso yo solo he visto un desastre político, y por lo tanto, yo le pediría a todos los ministros que antes de firmar ese decreto, se aseguren de su constitucionalidad, porque si no, evidentemente, tendrán que responder con su patrimonio», dijo.
Marcelo Forni, junto con lo anterior, dejó en claro que mientras el Gobierno hace uso de tan sólo el dos por ciento constitucional, la Alianza está utilizando su 100 por ciento en capacidades para tratar de buscar una solución al grave problema del Transantiago.
«Yo siento que toda esta discusión que se ha generado en torno al déficit del Transantiago, es absolutamente insuficiente. Yo creo que el problema no es superar sólo el déficit del Transantiago, sino que el problema es que hacemos después, y por eso yo le pediría al Gobierno que más allá que poner su atención en el dos por ciento constitucional, hiciera lo que hace la Alianza, que es colocar el 100 por ciento de sus energías, en trabajar para buscar una solución, una vez suplido el déficit», agregó el parlamentario.
