Por su parte, el timonel gremialista Juan Antonio Coloma instó al Gobierno a preocuparse del fondo del tema más que del origen de la información.
El diputado independiente Alberto Cardemil dijo que desde el 2006 el Ministerio del Interior tenía conocimiento sobre los supuestos vínculos entre las FARC y activistas mapuches de la región de la Araucanía.
«La Fiscalía Nacional le ha enviado al ministro del Interior la información completa de los antecedentes que ha recogido sobre el funcionamiento de grupos paramilitares, de grupos guerrilleros, de grupos extremistas -su organización, sus escuelas en el sur-, y se la ha mandado hace tiempo, entre julio del 2006 y enero del 2008», dijo el parlamentario opositor.
Frente a tales informaciones «no ha pasado nada», precisó Cardemil a radio Cooperativa, afirmando que «el país necesita una explicación respecto a qué hizo el ministro del Interior, qué hizo la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI) y qué hizo la Presidenta de la República si (la denuncia) le llegó».
En tanto, el presidente de la UDI, senador Juan Antonio Coloma, instó al Gobierno a que se deje de preocupar por el origen de la información y se dedique al contenido de la misma.
«Aquí he visto que al Gobierno y algunos medios de prensa lo único que les preocupa es de dónde viene el informe. A mí lo que me importa es lo que dice el informe, y si el Gobierno y la ANI lo tuvieron durante cuatro meses y no hicieron nada, me inquieta, me preocupa, y me parece mejor que se haya sabido que existía ese informe, porque hay peligro de que haya FARC al interior del país, y porque eso supone lógicas de violencia, lógicas terroristas», declaró el gremialista.
«Aquí ha habido una despreocupación o una falta de responsabilidad de la autoridad, que está más preocupada de saber de dónde viene la información que de ver si la información es correcta y ver qué se hace para evitar estos eventuales actos terroristas que nos afectarían a todos», concluyó.
