Carlos Osorio, secretario general del comité que promueve la candidatura, dijo que los brasileños reclamarán el derecho de América del Sur de organizar los Juegos y que Río es una ciudad ideal, con todas las condiciones para albergar el certamen.
La delegación brasileña que defenderá el próximo viernes en Acapulco la candidatura de Río de Janeiro para los Juegos Olímpicos de 2016 llegó este miércoles al puerto mexicano, llena de cábalas, confiada en atraer así la buena suerte.
«México siempre le da fortuna a Brasil. En 1970 ganamos el Mundial (de fútbol) y en 2002 obtuvimos la sede de los Juegos Panamericanos de Río-2007», dijo Carlos Nuzman, presidente del Comité que promueve la candidatura para las justas de 2016.
Madrid, Chicago y Tokio serán las ciudades rivales de Río de Janeiro en la búsqueda de la sede de los Juegos Olímpicos del 2016.
Nuzman dijo que esas ciudades merecen respeto y se negó a hablar de ellas, ni tampoco de si tiene asegurado los votos de las naciones de América.
«Nosotros no hablamos de votos. ¿quién no ha sido supersticioso?», comentó Nuzman, al atender a algunos medios en un pasillo del hotel de Acapulco, donde este jueves comenzará la Asamblea de la Organización Deportiva Panamericana (ODEPA).
Carlos Osorio, secretario general del comité que promueve la candidatura, dijo que los brasileños reclamarán el derecho de América del Sur de organizar los Juegos y que Río es una ciudad ideal, con todas las condiciones para albergar el certamen.
«Tenemos segura la sede del Mundial de fútbol en 2014 y al terminar, Río tendrá, con dos años de antelación, todo listo para organizar unos magníficos Juegos Olímpicos. Vamos a reformar el aeropuerto y a mejorar la red de transporte», señaló Osorio.
Representantes de Madrid, Río de Janeiro, Tokio y Chicago harán el próximo viernes presentaciones de 15 minutos cada uno para tratar de convencer a los Comités Olímpicos de los países de América de las bondades de sus candidaturas.
EFE
