La irrupción del presidenciable de RN con su propuesta de ampliar la Alianza por Chile hacia otras fuerzas políticas introdujo la cuña que se necesitaba para dividir la joven sociedad entre el Partido Regional Independiente y Chile Primero. Si bien el empresario se arrogó un punto, también abrió un nuevo flanco que estaba latente. Y se ganó un ataque nada de gratuito de parte del presidente del Senado, quien recordó que el dueño de Chilevisión representa la forma más genuina de la mala aplicación del modelo económico.
El coqueteo de ChilePrimero con Sebastián Piñera no cayó bien entre sus socios del Partido Regionalista Independiente, para quienes una coalición con la derecha significaría ser abiertamente inconsecuente con el discurso que los colorines levantaron al dejar la DC. Más allá de los temas coyunturales, como el caso del Transantiago, la molestia de Adolfo Zaldívar y los suyos se venía incubando desde mucho antes a raíz de sus diferencias con la forma como los gobiernos de la Concertación vienen aplicando el modelo económico. Y para el PRI, el empresario representa “la forma más genuina” de su “mala aplicación”.
De allí que el presidente del Senado haya salido a aclarar que Piñera “no tiene nada que hacer con nosotros”. Y le dio un portazo a la sola posibilidad de llegar a algún acuerdo político con el presidenciable de la derecha, a partir de su propuesta de ampliar la alianza opositora acogiendo a los sectores escindidos de la Concertación. Si bien los dirigentes del PRI evitaron dramatizar públicamente la postura asumida por sus socios de CH1, lo cierto es que no cayó bien el viraje, luego que los primeros facilitaron su plataforma para que los candidatos municipales de ChilePrimero pudieran presentarse a los comicios de este domingo.
En la tienda encabezada por Jaime Mulet incluso admiten que las declaraciones de Fernando Flores provocaron el éxodo de algunos de sus candidatos hacia el PRI -cerca de un 70 por ciento de los 120 que lleva ChilePrimero-, y no descartan que este fenómeno se pronuncie con el paso de los días o tras las municipales si un acuerdo entre Flores y Piñera se concreta.
“No tiene nada que hacer con nosotros este señor. Él es una opción clara que está en el entorno de la forma como se ha ido aplicando el modelo económico y no representa nuestras aspiraciones, ni tampoco las de la clase media y de lo que hay que hacer en Chile”, argumentó Zaldívar como respuesta a la invitación del empresario para sumarse no sólo a una alianza amplia de oposición, sino que implícitamente a adherir a su candidatura presidencial.
“El señor Piñera está muy nervioso”
Para el colorín lo peor es adelantarse demasiado en iniciar una carrera presidencial, por lo que “el señor Piñera está muy nervioso, y algunas personas cercanas a él también. No puede reclamar ni esperar nada de acá porque nosotros somos una expresión del cambio y una alternancia política distinta, mientras que él representa la forma más genuina de la mala aplicación de un modelo económico”.
Aunque tiene la convicción de que la Concertación “no merece” seguir gobernando, no pretende dar señales de que su desafección con la actual administración desemboque en un trasvasije de votos hacia el abanderado opositor, indicios que sí ha mostrado derechamente Flores. Primer gran desencuentro que le augura corta vida a este pequeño referente. Porque tras las municipales, el abanderado opositor necesita ir ordenando el naipe de tal manera de conocer, cada vez con más certeza, con quienes cuenta para enfrentar a la Concertación el 2009, lo que obligará a los dirigentes del PRI y ChilePrimero a definirse y, de mantenerse el actual escenario, a tomar caminos separados.
Mulet lo dijo con todas sus letras al precisar que, al aceptar la invitación del empresario, sus aliados políticos “hacen un giro claro a la derecha y hacia un modelo que al PRI no lo identifica en nada, porque es concentrador y monopolista, y es precisamente la antítesis de lo que queremos hacer nosotros de corregir el modelo económico”.
“Todos contra la Concertación”
En el piñerismo sienten que al menos se pueden atribuir un triunfo con el apoyo de Flores. Y aunque admiten que hubieran preferido asegurarse desde ya una sociedad que incluyera también al PRI, no descartan que ello ocurra. Especulan que la tienda de Mulet sólo se está haciendo la difícil, lo que atribuyen a que “Adolfo quiere ser candidato presidencial sí o sí; a diferencia de Flores”, y no les cabe “ninguna duda que para la segunda vuelta su candidato va a ser Sebastián, porque la idea de esta alianza es ‘todos contra la Concertación’”.
La convicción de algunos piñeristas se fundamenta en que si bien esta alianza entre el PRI y ChilePrimero se instauró en base a “situaciones muy coyunturales en las que necesitaban complementarse”, su mayor coincidencia está en su “carácter antisistémico”, mismo que terminará atrayendo los votos del PRI hacia la candidatura de Piñera en el ballotage.
Mientras que en el PRI admiten que sólo después del resultado municipal se tomará la decisión de levantar un presidenciable o no, pero aseguran que de no llevar un abanderado a competir el 2009 para intentar llegar a La Moneda, lo “único claro es que no votaremos por Piñera” porque eso sería ir contra de sus propias convicciones. En la tienda dicen que salvo esa, aún están todas las posibilidades abiertas y que su proyecto no necesariamente es a corto plazo, porque “estamos construyendo una alternativa de verdad”.
