«Queremos jugar lo mejor posible al fútbol, dar espectáculo, que los que vayan al estadio se sientan realmente cómodos viendo a la selección, que aquellos que lo sigan por la televisión digan ‘valió la pena ver a Chile'», dijo el timonel de la ANFP.
El presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), Harold Mayne-Nicholls, aseguró hoy que la selección chilena viajará a Sudáfrica con el propósito de «dar espectáculo» y mantener el fútbol ofensivo que tantos elogios mereció durante la fase de clasificación.
En una entrevista concedida a EFE, Mayne-Nicholls adelantó que Chile se ha propuesto dejar huella en la próxima Copa del Mundo a través de su estilo ofensivo: «Queremos jugar lo mejor posible al fútbol, dar espectáculo, que los que vayan al estadio se sientan realmente cómodos viendo a la selección, que aquellos que lo sigan por la televisión digan ‘valió la pena ver a Chile'».
Para el máximo responsable del fútbol nacional, llegar lejos en Sudáfrica, después de doce años sin presencia mundialista, es lo de menos. «Si a todo eso le sumamos después algunos resultados positivos sería espectacular, pero lo principal es hacer buen fútbol para que la gente se divierta», insistió.
Mayne-Nicholls estuvo hoy en Barcelona invitado por el Global Sports Forum, donde participó en un coloquio sobre deporte en los países que, como Chile, pueden presumir de una economía emergente.
El terremoto que azotó al país, no obstante, ha paralizado la mayoría de actividades, incluidas las que giran en torno al fútbol. «Este fin de semana» -anunció Mayne-Nicholls- «se reanudará el Torneo Apertura en algunos sitios donde ya se puede jugar, tanto en Primera como en Segunda División».
Antes, esta noche sin ir más lejos, el balón volverá a rodar en Coquimbo, donde Universidad de Chile se enfrentará a Universidad Católica en encuentro correspondiente a la Copa Libertadores. «Seguro que este partido ya va a traer alegría a mucha gente», comentó el presidente de la FFC.
El terremoto también ha obligado a cancelar los dos amistosos que la selección chilena tenía previsto jugar contra Costa Rica y Corea del Norte. En noviembre, el encuentro de preparación que debía disputar contra Alemania fue igualmente suspendido, esta vez por el suicidio del meta germano Robert Enke.
Mayne-Nicholls no esconde su preocupación por estos contratiempos, que han obligado a «reformular los proyectos de trabajo» que el cuerpo técnico que encabeza Marcelo Bielsa tenía programados.
Chile disputará un amistoso contra Venezuela el próximo 31 de marzo, aunque en el mismo sólo podrán participar jugadores de la liga local. La federación busca un rival para el mes de abril y ya trabaja en cerrar varias fechas para mayo.
«No es fácil reorganizar el calendario por las actividades que tienen el resto países. Además, nuestra preparación la vamos a hacer en Chile y no es fácil que los equipos de otros continentes vengan a jugar a Sudamérica previamente a la disputa de una Copa del Mundo», argumentó Harold Mayne-Nicholls.
Con todo, el presidente de la ANFP tiene fe ciega en el equipo y, sobre todo, en la labor de Bielsa, una apuesta personal suya y al que fue a buscar «con un objetivo clarísimo», el de devolver a la selección chilena tres cosas que, a su entender, había perdido: «mucho rigor, mucha humildad y mucha disciplina».
Ahora, Chile sueña con ser protagonista de un Mundial en el que se estrenará lidiando con un grupo complicado: Suiza, Honduras y España, sus rivales en la primera fase.
«España es una de las favoritas, pues es la vigente campeona de Europa, pero lo del favoritismo no es nada más que un lindo juego mediático», comentó el dirigente del fútbol chileno, quien concluyó que «lo verdaderamente importante es lo que pasa en los partidos, lo que los futbolistas deciden en el campo».
