Mientras La Moneda sigue negándose a conformar una mesa de diálogo, los legisladores reunidos en la comisión de Constitución, que continuará sesionado el fin de semana, echaron de menos una iniciativa más acotada considerando la urgencia de poner fin al ayuno que mantienen los 34 comuneros. Es un “ladrillo jurídico”, reclamó el senador del MAS Alejandro Navarro.
Aunque el gobierno, representado en la Comisión de Constitución de la Cámara alta por el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, niega que esté traspasando la responsabilidad de la solución del conflicto mapuche al Congreso, lo cierto es que se espera que sea este poder del Estado el que resuelva con la celeridad y urgencia requeridas la situación que afecta a los presos mapuche en huelga de hambre. Por lo mismo es que este sábado la instancia encabezada por la senadora Soledad Alvear (DC) sesionará durante la tarde.
Concluida la cita pasadas las 19:00 horas de este viernes, el titular de Interior aseveró que “lejos de traspasar la responsabilidad ha tratado de ser un gobierno que asume los problemas y da soluciones. (…) nadie puede estimar que nuestro gobierno está traspasando sus responsabilidades”, postura con la que no concuerda el senador del MAS Alejandro Navarro, quien participó en el debate de la comisión y se retiró pesimista respecto a sus resultados.
A su juicio, el proyecto del gobierno no busca terminar con la huelga de hambre de los comuneros mapuche, sino que por el contrario es más bien un “ladrillo jurídico” imposible de estudiar y tramitar con la premura requerida. Por lo que aseguró que “veo difícil un acuerdo (con el gobierno) para dar término a la huelga”. Ello, porque la iniciativa gubernamental ya no sólo habla del “testigo encubierto”, sino que además crea la figura del “agente encubierto”, lo que podría generar “un debate mucho mayor”.
En esta línea, el senador señaló que lo que se está haciendo no contribuye un aporte “para quienes queremos de verdad salvar la vida de los mapuche en huelga de hambre”. Por lo pronto, destacó que en la sesión de hoy “hemos avanzado muy poco” e instó al gobierno a decretar una amnistía, para solucionar el problema actual y evitar que muera un comunero, pues según recalcó ninguno de los huelguistas está involucrado en hechos de sangre.
La molestia del parlamentario pasa por el hecho de que el proyecto del gobierno, que ingresó con suma urgencia, contiene 37 artículos y requiere el tiempo de cualquier otra iniciativa para su tramitación. No resuelve, dice Navarro, la urgencia a la que están enfrentados en este momento.
De hecho, una parte importante de la sesión de la Comisión de Constitución fue declarada secreta. Según trascendió durante ese período se intentó buscar un camino para terminar con la huelga de hambre. Pero no hubo ningún acercamiento que posibilitara esa opción.
La postura de Navarro no es única. Los parlamentarios de la Concertación Soledad Alvear (DC) y José Antonio Gómez (PRSD) coincidieron en que el proyecto del Ejecutivo no le da una salida al problema contingente. El presidente del Partido Radical también señaló que la iniciativa “modifica la Ley (Antiterrorista) en general y no se hace cargo de la huelga”. E insistió en la necesidad de que el gobierno convoque lo antes posible a una mesa de diálogo que termine con la huelga. Porque el proyecto del Ejecutivo no asume la emergencia”.
A lo que, indirectamente, el ministro se volvió a negar y pidió a la Concertación que respalde la iniciativa del gobierno, señalando que la modificación de esta ley se debe hacer “con visión de Estado” y manifestó su convicción de que “la oposición va a estar a la altura”.
El senador Patricio Walker (DC) indicó que el debate tiene dos objetivos: generar “una muy buena ley antiterrorista, que establezca las garantías de un debido proceso; y, que dé solución a los huelguistas”.
Por lo mismo, anunció que la comisión trabajará el fin de semana con el fin de avanzar lo más rápido posible en la búsqueda de una decisión. Esta instancia sesionará desde las 16:00 horas hasta las 19:00 prorrogable, para llegar a la próxima semana con un acuerdo que pueda pasar a la Sala. Ello, porque los senadores –dijo Walker- están conscientes que están contra el tiempo. Y coincidió con sus predecesores en la necesidad de que el gobierno se siente en una mesa de diálogo con los mapuches.
Muy distinto opinan los parlamentarios oficialistas, que no estiman necesario que el Ejecutivo se siente a conversar con los mapuches. Por su parte, el senador de RN Alberto Espina advirtió que “no podemos debilitar la legislación chilena” en el ámbito del terrorismo y exigió un “equilibrio” en el trato que se está dando a los comuneros con las víctimas. Ello, porque a su juicio no ha habido preocupación por las últimas, que son las afectadas. “Las víctimas son las grandes olvidadas”, recalcó.
Andrés Chadwick (UDI) aclaró derechamente que “encontramos que no es necesaria”, aludiendo a la presencia del gobierno en una mesa de diálogo. Mientras que el también gremialista Hernán Larraín “que no estamos con un problema de tiempo, sino de voluntad política” de parte de la Concertación para avanzar en la tramitación del proyecto del Ejecutivo.